Haruki Murakami: comparación con otros escritores japoneses

Haruki Murakami atraviesa los muros de las culturas y trasciende a través del tiempo y del espacio. Lleva más de treinta años escribiendo, y siempre nos conmueve con una magia que muchos consideran comercial. Pero hay una pregunta bastante curiosa: ¿por qué sus coetáneos no han logrado tanto reconocimiento mundial?

En ningún caso digo que sean peores escritores que Murakami. Ni de lejos. Esmás, algunos como Yasunari Kawabata o Kanzaburo Oé han logrado el reconocimiento del Premio Nobel de Literatura, título casi imposible de conseguir teniendo en cuenta el gran número de autores existentes. Sin embargo, lo más probable es que Murakami nunca lo consiga. ¿Por qué? Por la gran calidad literaria de la que los demás escritores nipones gozan, y que Haruki no utiliza.

Vamos a centrarnos,por ejemplo, en Yukio Mishima y su excepcional escritura. Al leer una de sus novelas, lo primero que piensas es que estás en una época anterior, junto a los samuráis, las mujeres vestidas con quimonos, hombres luchando con espadas de kendo… y la historia no va ni siquiera de ninguno de estos temas. Simplemente, sus historias son como la música: evocan recuerdos, épocas pasadas, y te traen subelleza, incluso cuando el relato se sitúa en un tiempo y espacio cercano al del lector.

Otro ejemplo podría ser Kenzaburo Oé y su gran tendencia a reflejar en sus textos su pasado, su presente y su inminente futuro. Es una costumbre muy suya –y de muchos, claro está– el mero hecho de explicar su vida con otros personajes, otros lugares y hechos un poco diferentes. En su libro Una cuestión personal,el protagonista es un hombre cuyo primer hijo nace con un grave problema cerebral. Igual que Hikari, el hijo real de Oé. Ése, en mi opinión, es un punto más a favor de este gran autor, ya que consigue conmover a sus lectores, incluso más a los que se han molestado en conocer su biografía.

Por último, Yasunari Kawabata, otro gran maestro. De él, sólo he tenido el honor de leer las Historias dela palma de la mano, recopilación de microcuentos que ha escrito durante toda su trayectoria literaria, desde 1921 y 1972. Para describirlos, sólo se necesita una palabra: asombroso. Al igual que Mishima, la belleza es el principal componente de estos relatos, breves y, muchas veces, también sin sentido. Sus palabras nos marcan a fuego todas las imágenes vistas y vividas en esos microrrelatos:imágenes cotidianas, fantásticas, abstractas, surrealistas. Desde mi punto de vista, te enganchan porque no se sabe con qué nos vendrá a continuación. ¿Algo mundialmente conocido, o quizá algo soñado?

En cambio, Murakami es algo más sutil, sencillo y universal. Trata temas cercanos, sin sentir la necesidad de comunicarse a través de metáforas, comparaciones o léxico un tanto incomprensible. No nostransmite la belleza del momento ni la importancia de la palabra; Murakami, aunque no lo diga ni lo muestre, se centra en los sentimientos oscuros del ser humano, lo que preocupa sinceramente a la persona, como es la soledad del alma y el amor deseado. En este mundo occidentalizado, es algo que casi todos sentimos, así que es mucho más fácil identificarse con esto que con una escena idealizada deamor perfecto.

En cualquier caso, hablar de un autor japonés es mencionar un mundo aparte de los otros. Cada uno de ellos trata los diferentes temas desde un punto de vista distinto; es como hablar de diferentes autores repartidos en diferentes épocas históricas. A continuación, vamos a ver algunos puntos que he querido destacar y comparar entre estos cuatro grandes autores.El amor

Este sentimiento mundial ha sido expresado de distintos modos a lo largo de la literatura universal; de hecho, es uno de los tópicos preferidos, aunque no quiere decir que sea el principal.

En los cuatro autores que he leído, se puede clasificar tres tipos de amor, con sus diferencias y similitudes: por...