¿Hemos llegado ya? RL STINE

¿HEMOS LLEGADO YA?
R. L. STINE







INTRODUCCIÓN


Durante las vacaciones de verano, mis padres solían llevarnos a hacer largas excursiones en coche. Mi hermano y yo, apretados en el asiento trasero, nos pasábamos todo el viaje discutiendo y peleándonos.
Por el camino mamá nos iba señalando todas las vacas y caballos que veía, y papá, invariablemente, terminabaperdiéndose. ¡Cómo odiábamos aquellos viajes!
Siempre había alguno de los tres que decía:
​-Yo me bajo.
-​¡Por mí, no hay inconveniente! -solía decir mamá-. Nadie dijo que fuera un viaje de ida y vuelta. No tenéis por qué volver con nosotros.
Lo decía de broma, pero yo siempre me preguntaba qué sucedería si fuera en serio.




Mi hermano, Artie y yo habíamos salido de excursión en coche conmis padres, a regañadientes. Estábamos enfadados y no teníamos intención de disimularlo.
​-¿Hemos llegado ya? -protestó Artie, encorvado junto a mí en el asiento trasero.
Mamá se echó a reír.
​-Pero si acabamos de sacar el coche del garaje, Artie.
-​¿Y cuándo vamos a llegar? -insistió mi hermano.
-​Cuando lleguemos, llegaremos -respondió papá, reduciendo la velocidad para detenerse en unsemáforo. A papá le gusta hablar de modo enigmático. A mí no me gustan nada los enigmas. Me gustan las cosas claras.
​-¿A qué viene este viaje tan tonto?
-Estamos de vacaciones -respondió mamá.
​-Pero en vacaciones nosotros siempre vamos a la playa -repliqué.
-Pues este año, no -intervino papá, sin apartar la vista de la carretera.
Artie, a mi lado, se había recostado en el asiento y jugaba conla Game Boy que reposaba sobre sus rodillas.
​-Richie Corwin salió de excursión en coche con sus padres la semana pasada - anunció Artie.
​-¿Y lo pasó bien? -preguntó mamá.
​-No lo sé -respondió Artie, encogiéndose de hombros - . Todavía no ha vuelto.
Papá adelantó a varios coches y se metió en el carril central de la carretera.
-Pam y Kelly también se fueron a hacer una larga excursión encoche este verano agregué yo. -¿Lo ves, Tammi? ¡Está de moda! -dijo mamá.
​-¿Y ha regresado alguno de los dos? -preguntó papá.
Algo en su pregunta me hizo cavilar. Su voz sonaba extraña, como tensa.
​-No. Aún no -respondí.
​-¿Dónde estamos? -pregunté-. Hace horas que salimos y no hemos visto más que granjas y campos.
​-Esta región es muy grande -respondió papá. Me incliné hacia ellos,agarrado al respaldo del asiento de mamá.
​-Venga, dadme una pista de adónde vamos. Sólo una pista. -Alargué el brazo para coger el mapa que mamá tenía desplegado sobre la falda-. Déjame ver dónde estamos.
​-Aquí. -Mamá cogió el mapa e hizo la payasada de siempre: lo desplegó, le dio la vuelta a uno y otro lado, lo arrugó, lo planchó, lo puso del revés, del derecho.
Papá se echó a reír. Leencantan las payasadas de mamá.
Al final, harto ya, intenté arrancarle el arrugado mapa de las manos... ¡y lo rompí por la mitad! Papá y mamá se echaron a reír a carcajadas.
​-Ahora tenemos dos mapas - observó papá-. ¡O sea que debemos de estar en dos sitios a la vez! Lo que acababa de decir no tenía ningún sentido.
-​¡Nos hemos salido del mapa! -exclamó mamá. Más carcajadas. Pero la risa cesó deinmediato cuando oímos gritar a Artie, despavorido:
-​¡Para el coche! ¡Para, papá!
Papá frenó bruscamente. El coche derrapó con gran chirrido de neumáticos, se salió de la carretera y fue a parar entre la hierba.
Agarré la manija de la puerta, tiré de ella y abrí enseguida.
-​¿A qué demonios viene esto? -oí exclamar a mamá.
Pero yo ya salía pitando y corría entre la hierba tras el perro queArtie y yo acabábamos de ver por la ventanilla del coche.
-​¡Ven, bonito..., ven! ¡No tengas miedo! -lo llamaba Artie.
El perro estaba parado en el borde de la carretera.
Pasó un camión a todo trapo y le levantó el pelo del lomo, de un color blanco arenoso.
-Creo que es un collie - observé jadeante, aproximándome.
-​¿Estará perdido, o crees que lo habrán abandonado en la carretera?...