Hija

A quien pudo ser mi hija…

Escribir estas líneas con total sinceridad no es un proceso fácil. Esa sinceridad con la que se debe reconocer lo imperfecto de ser humanos, esa queduele, que cala los huesos y hasta achica el alma. Así hija te debo escribir, para que sepas qué dejé de hacer como padre, qué pasó por mi mente para impedir que crecieras y pudierasabrazarme y sentirnos carne de nuestra carne.

Recuerdo como fuiste creada, en medio de la pasión, como debe ser, por amor, el amor a tu madre. Aunque amor egoísta, sin pensar en que túeras la consecuencia lógica de ese sentimiento. Miedo, físico miedo de que tu madre estuviera embarazada, no fue dicha, fue la desdicha de no agradecerle a Dios tan lindo regalo. Obrécomo el más cobarde de los cobardes, la cara baja y oculta ante la responsabilidad, la cara esquiva de una actitud mezquina, que no tuvo valor para darle seguridad a tu madre, quesupiera que yo me sentía feliz de tenerte, de no escatimar para brindarte una vida rica en amor, apoyo y valores.

Si amor, fui yo quien no tuvo lo que se necesitaba. Tu madre llora y seme enfría el corazón, como que deja de latir y me pregunto, ¿no sería justo que lo hiciera del todo? ¿Mi vida por tu vida? Pero sólo Dios tiene ese poder, poder que yo pretendí teneren no haber hecho lo correcto, en permitir que hoy nos acariciara tu sonrisa.

El perdón del cielo no pretendo tenerlo, sí que mi Dios me ayude a que en su seno tu sepas que no teolvido, aunque recordarte debería ser con alegría y no con la tristeza que oscurece cualquier día.

Resarcir tan terrible falta no se cómo se hace, pero reencontrarme con tu madre ytener esta oportunidad de expresar el dolor, sí que está en manos divinas. Yo te pido perdón hija mía, Dios te guarde y sepa que hoy soy consciente de mi grave error.

Juan Gabriel