HISTORIA ARGENTINA 4TO COMUNICACI N

INTRODUCCION

CAUDILLOS FEDERALES


Estos opositores al dominio económico político y cultural de Buenos Aires surgieron en el siglo XIX, expresando la indignación de sus provincias, expandiendo el grito del interior.
El análisis histórico nos demuestra que existían dos corrientes antagónicas para explicar y justificar este fenómeno socio – político que caracterizo a la república Argentina enlas décadas que siguieron a la independencia nacional, temidos y odiados por los unitarios y los partidarios del predominio del puerto de Buenos Aires pero a su vez amados y respetados por amplios sectores populares sobretodo del interior del país que los reconocían como lideres capaces de conducirlos en la lucha por los intereses y principios que compartían.
La historia oficial, escrita por losunitarios, vencedores de este conflicto civil que tiño de sangre y caos a nuestro país muestra a los caudillos federales como personajes barbaros crueles e ignorantes incapaces de ordenar los destinos de nuestra nación.
Pero el revisionismo histórico nos presenta a estos personajes como representantes reales de la sociedad, las creencias, las necesidades, las preocupaciones y los hábitos de unanación en una época determinada de la historia.
El objetivo de este trabajo es mostrar las visiones encontradas sobre el rol de los caudillos federales en nuestra historia, escuchando las dos campanas del análisis historico
El Facundo de Sarmiento como manifiesto liberal – unitario y los textos de Pacho O ‘Donell (Juan Manuel de Rosas El maldito de nuestra historia oficial y Caudillos Federales Elgrito del interior).









DESARROLLO:

Luego de la gesta revolucionaria en Mayo de 1810, que concluyo en la formación del primer gobierno patrio y que condujo paulatinamente a la independencia declarada en 1816, no sin mediar una extensa sangrienta y disputada guerra de liberación , contra el imperio español ,que se resistía tozudamente a perder sus dominios sobre la América colonial;sobreviene la etapa de la construcción nacional como estado independiente en el orbe. Entonces quedan en evidencia dos corrientes antagónicas que se disputaran, también de manera cruel ,la hegemonía y sus ideas políticas en esta construcción.
En consecuencia para quienes comenzaban a identificarse como “unitarios”, la construcción política y material de la nación, y la necesaria eficaciarevolucionaria para consolidarla, estaban atadas a la “inevitabilidad” del poder político centralizado en una casta de posibles porteños y sus asociados provinciales. La oposición a esta perspectiva centralista, perjudicial para los intereses de las provincias, plasmo en una tendencia política y poco a poco en una serie de principios que conformaron el federalismo o doctrina de los estados libres en unEstado nacional políticamente descentralizado. Esta corriente no pudo entenderse sin el surgimiento de los caudillos, cuyo liderazgo emanaba naturalmente de una plebe que se sentía representada por esas figuras.
Esto de alguna manera se ve reflejado a lo largo del tiempo en la literatura Argentina, por un lado se representa la visión de Sarmiento en el Facundo y Echeverría en El Matadero sobre losfederales y sus caudillos en particular.
En estas citas podemos observar la visión negativa de Sarmiento en el Facundo hacia los caudillos federales:
“Estas dos fuerzas habían llegado a su más alto punto de desenvolvimiento, y sólo una palabra se necesitaba para trabar la lucha; y ya que el partido revolucionario se llamaba unitario, no había inconveniente para que el partido adverso adoptase ladenominación de federal sin comprenderla. Pero aquella fuerza bárbara estaba diseminada por toda la República, dividida en provincias, en cacicazgos; necesitábase una mano poderosa para fundirla y presentarla en un todo homogéneo, y Quiroga ofreció su brazo para realizar esta grande obra .El gaucho argentino, aunque de instintos comunes a los pastores, es eminentemente provincial: lo hay porteño,...