Historia de la arquitectura, s.xviii

El s. XVIII comienza con cambios en el ámbito económico, político y social (acenso de la burguesía al poder en un estado republicano donde el pueblo participa) que acarrean un cambio de mentalidad: los filósofos imponen la razón y la ciencia sobre la religión y plasman sus teorías en la Enciclopedia. El arte y la literatura se vuelven más accesibles y se dirige a un público más amplioplanteándose como instrumento social. La Ilustración toma un tono más moralizante en vistas de la creación de un mundo nuevo y mejor (la obra adquiere un valor de educación cívica).
Además, gracias a los estudios arqueológicos analiza profunda y objetivamente el lenguaje del clasicismo (la arquitectura antigua y renacentista) y llega necesariamente a negar la validez universal de sus reglas. Entonces, lasreglas clásicas se mantienen como modelos convencionales pero ya no existe frontera para su aplicación. La adaptación de estos modelos depende únicamente de una decisión abstracta del artista, que puede aceptar ciertas referencias, refutarlas o manipularlas a su manera. Pero son tantos los estilos que se hallan simultáneamente presentes que el repertorio historicista resulta discontínuo. Lo quediferenció este Historicismo de los anteriores fue que revivió varios estilos diferentes dando lugar al Eclecticismo en 1830 (Cousin: “No se debe aceptar a ciegas la validez de un único sistema filosófico negando la validez de los demás, sino decidir racionalmente las formulaciones del pasado adecuadas a los problemas del presente”). “El Clasicismo, en el instante en el que queda precisadocientíficamente, se convierte en convención arbitraria y se transforma en Neoclasicismo”. El Historicismo aparece como una apertura hacia el futuro ya que permite, en virtud de su abstracción, adaptar el lenguaje tradicional a las nuevas exigencias.
Esto genera un cambio de rumbo: se venía de una época Barroca-rococó donde el poder lo tenía la aristocracia y que se caracterizaba por lo voluptuoso, loexagerado y por basarse en la imaginación más que en la racionalidad. La cultura Iluminista del s.XVIII orienta en sentido racionalista la relación arte-imaginación. El Rococó se presenta como un arte al servicio de la comodidad y el lujo, la trivialidad y el libertinaje. El artista reacciona con un estilo severo y disciplinado, tomando el rol de educador con lecciones y ejemplos de valores como temaprincipal. Las complejidades sinuosas y oblicuas del espacio cambian por una caja de perspectiva simple, los colores vivos o pastel son reemplazados por tonos sombríos o sin colores, solo formas puras y sin sombra. En arquitectura estos ideales se ven reflejados en la simplificación de los espacios, el uso de geometrías puras y la eliminación de ornamentos escultóricos.
Surgen entonces losdefensores del estilo griego, como Winckelmann (que quería imitar su nobleza y serenidad y realzar su belleza de ideal naturalista) y Piranesi, defensor de los romanos. Este último quería representar la monumentalidad de la antigua Roma, por lo que no prestaba atención a los órdenes y las decoraciones superficiales, sino que en sus grabados les dio a las ruinas mayor magnificencia, alterando la escalay yuxtaponiendo elementos.
En términos generales, la arquitectura del s.XVIII y XIX se ve condicionada por dos tradiciones de pensamiento: el racionalismo francés, surgido de este deleite por la claridad y la certeza matemática, y la tradición empírica británica que sugeriría el Pintoresco. Análogamente se desarrollan los principios geométricos de ordenación de Durand y la interpretaciónracionalista del Gótico en Francia que luego llega a Inglaterra.
Uno de los primero personajes que surge siguiendo esta línea de pensamiento es Perrault que sostiene que existen 2 bellezas: la positiva (que se basa en la calidad de los materiales, en la precisión de su ejecución y en las dimensiones y simetría) y la arbitraria (que reside en las relaciones de proporciones, la forma y la estructura)....