Historia del vallenato
Hace un siglo ya florecía en diversos lugares el canto vallenato. Como sabemos, resulta inútil e imposible atribuirle una sola cuna. La extensión de la gaita por toda la Provincia había abierto ya las puertas a la incorporación del acordeón en el conjunto instrumental vallenato. Incorporación que, como es obvio, no se produjo simultáneamente en todos los puntos, sino demanera paulatina.
El proceso pudo tomar hasta tres o cuatro decenios, pues el acordeón empezó solitario su carrera por la comarca. El propio Emiliano Zuleta Baquero recordaba en entrevista con Tomás Darío Gutiérrez que «antes uno tocaba solo, sin caja ni guacharaca». Zuleta Baquero, nacido en 1912 en la zona central, aludía a las postrimerías de los años 20; para entonces ya hacía décadas queel acordeón, como sucedáneo de la gaita o carrizo, se acompañaba de caja y guacharaca en otros lugares de la Provincia.
El matrimonio entre los tres instrumentos fue un efecto social y popular. Esto es, se produjo en reuniones de gente llana: parrandas, cumbiambas, fiestas y merengues, que no eran sólo un ritmo sino un tipo de jolgorio. Francisco «Pacho» Rada, autor de «El caballo Liberal»,recuerda que, ya por los años 30, «en cada cantina tenían un acordeón, una caja y una guacharaca para que tocaran los acordeoneros».
El vallenato surgió de abajo y tardó más de medio siglo en adquirir rango social. Era, como lo sostenía Ursula Iguarán, una música perniciosa y popular.
Las colitas
Uno de los escenarios donde empezó a codearse el vallenato con la música que escuchaba ybailaba la burguesía -valses, mazurcas, canciones napolitanas- fue el de las colitas. Era este el nombre que recibían las «colas» o finales de fiesta de la clase adinerada: bodas, bautizos, cumpleaños, festejos religiosos... Durante el sarao, mientras los señores se divertían con la música europea que interpretaba una precaria orquesta provinciana, los trabajadores pasaban la fiesta en la cocina ylos galpones a punta de acordeón, guacharaca y caja. Despachada la orquesta, los de atrás eran invitados a pasar adelante, y patrones y vaqueros se sentaban a tomar y cantar juntos.
Se ha discutido acerca del papel que cumplieron las colitas en esta historia. Algunos dicen que estos remates de fiesta fueron el pabellón de maternidad del vallenato, pues combinaron ritmos europeos y nativos: entreambos dieron a luz los aires vallenatos. «Las colitas son el ancestro directo del vallenato moderno», afirma López Michelsen.
Pero parece más acertado pensar que las colitas no ayudaron a formar el género, sino a divulgarlo. Para empezar, esta clase de fiestas improvisadas no se conocieron en toda la región, sino tan sólo en la zona del Valle de Upar. En El Paso no hubo colitas. En muchoslugares del río tampoco. Y, por otra parte, los historiadores indican que las colitas surgieron a comienzos del siglo XX, cuando ya el vallenato había empezado a coger ritmo con el trío del instrumental clásico.
Piquerias
En cambio, piquerias y retos sí constituyeron desde el principio uno de los más efectivos moldes de creación, propagación y desarrollo del vallenato. La leyenda de Franciscoel Hombre habla de su desafío con el diablo, a quien únicamente logra derrotar cuando le canta el Credo al revés. Los grandes acordeoneros viajaban durante días para acudir a piquerias concertadas de antemano o a través de recados, como lo atestigua «La gota fría»:
La historia del vallenato registra piquerias legendarias, como las de Francisco Moscote Guerra (el verdadero Francisco el Hombre)y Abraham Maestre; el mismo Abraham Maestre y Cristóbal Lúquez; Víctor Silva y Octavio Mendoza; Emiliano Zuleta y Chico Bolaños; Samuelito Martínez y Germán Serna; Samuelito y Náfer Durán («larga y fea -según Samuelito-, donde hubo hasta privados y heridos»); Eusebio Ayala y Luis Pitre (miembro de una respetada dinastía de músicos); Octavio Mendoza y Eusebio Ayala; Eusebio Ayala y el Mocho Mon,...
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