Historia, ¿para qué?
“El hombre que desea conocerlo todo, desea conocerse a sí mismo.”
Historia para aprender, Historia como guía, ejemplo y aviso de lo presente, advertencia de lo por venir.Cervantes la definió incluso como “émula del tiempo… depósito de las acciones, testigo de lo pasado”; pues claro nos quedamos en la mera definición, pero eso debe decirnos algo, acaso ¿no usamos laHistoria para recordar (que por cierto, significa algo así como “volver a pasar por el corazón”)? Pues como “testigo del pasado” nos sería de mucha ayuda. Muchas ideas nacen cuando comenzamos a hablar del“para qué” de la Historia, pero debemos definirlas o entenderlas, tarea que ahora presento.
Desde la idea de comprender el pasado hasta la idea de guía o más familiarmente Historia magistra vitae, seextienden las distintas formas que pretenden explicar el fin de la Historia.
Historia para conocer la verdad. Aquella idea de Historia para explicar el presente por el pasado y además poder reconoceruna proyección de lo que será nuestro futuro. Historia para recordar. Bajo un umbral positivista, Historia para narrar lo sucedido.
Por otra parte hay quienes afirman o dan un sentido a la Historiacomo legitimar el poder o símbolos populares por ejemplo. Pero casi desde un comienzo, podemos hablar de una Historia maestra de la vida, que nos dote de aquellos prácticos preceptos para guiarse enella; Historia como guía de los hechos que se repiten. Historia que sirve para dar una identidad, una actitud frente al presente, un interés y propósito hacia el mismo.
Historia que hoy más que nunca seusa con fines ideológico-culturales y que además propicia esa actitud dominante hacia la sociedad. Problema con el que han “luchado”, desde que la disciplina es tal, los historiadores en busca de unaHistoria “objetiva o neutral”. Tarea muy compleja pues hay que “admitir que la elaboración de una imagen del pasado está demasiado configurada por los intereses dominantes en la sociedad”, sin...
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