historia transicion

Juliá, Santos. Capítulo 7. Julio
Valdeón et al. Historia de España.
Madrid: Espasa Calpe, 2003,
516-544

7. UNA DEMOCRACIA POR FIN CONSOLIDADA
( 1 9 7 6 ..)
.

Tanto se había hablado,en cancillerías,en despachos
oficiales, en cí¡culos de Ia oposición, en la calle, de las
previsionessucesorias,que cuandofinalmenteocurrió el
llamado hecho biológico, nadie sabíalo que iba a pasar.
En ele\terior.no era raroencontraropin¡onesque expresaban el temor de que Españavolviera a la sendapor la que
había entradoen los años treinta, un experimentodemasiado breve y caótico de vida democrática, según escribía
por entoncesCiovanni Sartori. La dramáticaexperiencia
de la guerracivil habíafijado una imagende atraso,extremismo, pasióny crueldad,valorespoco propiciosa construir sobreellos unsistemapolítico democráticoy una cultura cívica moderna.En el interior, sin embargo,se daba
por seguroque la sociedadhabíacambiadotantoy las institucionesdel régímenhabíanquedadotan obsoletas,que
el destinollevaríaa un sistemaequiparablea los vigentes
en Europa.El problemaconsistíaen cómo llegar a esameta,
previsibles como eran resistenciasprocedentesde círculos
políticos y militares capacesdecontrolar los resortesde
poder.Las fórmulas se multiplicaron y diversosarbitrismos florecieronmientrasun ancianogeneralagonizabay
un príncipe en su treintena se disponía a asumir la jefatura
del Estado.

IiDAD CONTEMPQRANEA

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RUPTURAPACTADA

En verdad,nadaal finalizarel año 1975augurabaun futuro prometedor.La muerte de Francoy la proclamación
como rey de Juan Carlos de Borbónacontecieronen plena
crisiseconómica,desatadaen 1973por la subidade orecio
de lo s ca rbu rl nte .:en el lr ago rd e unr cr isisexterio.agu Ji za dapor la in vrsid n ma rro qu ide los terr it uliu sesp rñole \ del Sa ha ra.y en una profund l c ri "is d e r.eg imen.co n
Ias facciones de la dictadu¡a enfrentadasdesde 1969.
Desde que el gobierno formado por Carlos Arias tras el
asesinatode Carreromostró su incapacidad para impulsar
cualquier política de reforma, no habíaexistido ninsuna
p oli ti ca.n i económic a.ni in t er ior .n i exr erior.dig nade e"e
nombre.Paralizadopor la reacciónde los elementosinmo_
vilistas y bloqueadopor las maniobrasde cí¡culos milita_
fes cercanosa la camarillafamilia¡ de Franco.en noviem_
bre de 1975 Arias era tan cadáver político como Franco lo
crafísico.
De ahí la decepciónque produjo su ratificación por el rev
,,1frentedel gobierno.Por su pres¡dente.
el primergobiemá
de la monarquíap¡esentabatodaslas aparienciasde ser el
Liltimo de la dictadura,aunquesu formación evidenció la limitadacapacidadde iniciativadel rarificadoCa¡losArias.
que hubo de admiti¡ a su vera a notoriosreformistasde diverso origen, como Manuel Fraga,JoséMaría Areilzay Antonio Garrigues.Era un gobierno construido sobre la Dauta
de equilibriosentrefaccionesdel regimen.con el propó"iro
cleavanzar en una reforma mal definida pero fuertemente
(onlroladade\deel poder.El problemaeraque Frlnco ya no
cstabaallí y que,sin é1,su modelodejabaal descubiertoel
anacronismode Ia fórmula: las faccionessólo eran persona_
lidadesrodeadasde séquitospoco numerososyenfrentadas
cntre sí por las tormentasdel pasadoy por sus propuestas
parael futuro.

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SANTOS
JULIA

Esas diferencias habrían podido tal vez remediarse con
unos objetivos de gobiemo claros y compartidospor todos.
Arias nunca los tuvo y adoptóel plan de su vicepresidentey
ministro de la Gobernación,Manuel Fraga,que pretendía
ser un Cánovas redivivo y proceder a una apertura controlada,suficientepara integrara una oposicióndispuestaa desempeñarel papel de Sagasta.Se tratabade reformar tres
Leyes Fundamentales-de Cortes, de Sucesióny Orgánica
del Estado- y las de Reunión y de Asociación, y aprobar
una nueva Ley Sindical y una reforma del sistematdbutario.
Con alguna oposición, las Cortes aprobaronlas refbrmasde
las leyes de Reunión y de Asociación que legalizabanla...