Historia

EL SINDICALISMO Y EL PLAN LABORAL

SEPTIEMBRE 1979

El movimiento sindical chileno atraviesa por un fase particularmente crítica. Factores de origen y naturaleza diferentes configuran esta realidad. Conclusivamente, se puede afirmar, sin peligro, que esa situación es el resultado de la derrota infringida a los trabajadores por el golpe militar del 11 de septiembre de 1973. Efectivamente, elderrocamiento del Gobierno de la Unidad Popular, junto con desmantelar la superestructura política de la clase, erradicar sus partidos políticos, detener, asesinar y expulsar del país a los dirigentes, se extendió al movimiento sindical, dislocándolo. La prolongación contrarrevolucionaria hacia los sindicatos debe apreciarse más allá de la desaparición de los más conspicuos dirigentes ligados alaparato político partidista, quienes reflejaban las peculiares relaciones –de dependencia- del movimiento económico de la clase a las expresiones propiamente políticas. La ofensiva se abalanzó sobre amplios sectores de esa vanguardia social sindical que, en los meses cruciales de 1973, transicionaba a superar la relación orgánico-política que, hasta esa fecha, mantenía con la dirigencia partidistatradicional, cobijándose en los Cordones Industriales. Más aún, golpeó a millares de trabajadores ligados a los Partidos Socialista y Comunista y al élan del Gobierno de la Unidad Popular. Al no producirse un combate, aún en el plano defensivo, la derrota se precipitó como una catástrofe que operó por si misma, acentuando los factores de suyo negativos. Si bien, formalmente la dictadura no hadestruido los sindicatos, en la actualidad los ha paralizado, desnaturalizado, reduciéndolos a la impotencia. Los dirigentes en ejercicio fueron impuestos y cumplirían la misión de gendarmes al servicio de la Dictadura.
Los acontecimientos de 1973, por su profundidad, extensión y dramatismo, constituyen suficiente explicación en la comprensión de la crisis que afecta al sindicalismo. Con plenaconciencia de esa determinantes, no es sensato detenerse solamente en ese punto; otros factores deben ser considerados.
El tiempo no ha transcurrido en vano. Modificaciones de profundo significado se están produciendo en el campo sindical, avizorando una reanimación interna, la que servirá de acicate a la recomposición del conjunto del movimiento obrero nacional. Sobran elementos que así lo indican,vigorizando una visión optimista del curso futuro de la lucha de clases.
Interesa al pensamiento revolucionario desentrañar la orientación de los acontecimientos, clarificar las ideas y esmerarse en encontrar los medios que aseguren un progreso sano de este sindicalismo, que comienza a sacudirse. Se trata, evidentemente, de la primera fase de una convalecencia, con explicables debilidades que nodeben extrañar. Es importante comprender que los sindicatos deberán enfrentar el Plan Laboral, elaborado por al Gobierno, justamente en estas condiciones y no en otras idealmente deseables. Esas leyes se han dictado con la finalidad de responder y, a su vez, desvirtuar la inquietud que, desde hace meses, sacude a los trabajadores sindicalizados.
Las debilidades del sindicalismo nacional antecedena la derrota de 1973 y se entroncan a las características orgánicas, impresas por el desarrollo social, acentuadas negativamente si se considera la orientación estratégica impuesta por la dirección política que, en lo fundamental, mantuvo al sindicalismo dentro del status burgués. Una mirada al pasado nos ayudará a la comprensión del fenómeno.

I
REPASO DEL SINDICALISMO

Las relaciones entrelos sindicatos y las empresas y el Estado se han regulado (por lo menos hasta 1973) por las disposiciones del Código del Trabajo, que se genera en los años 1920-24, y al cual, a lo largo de los años, se le han agregado leyes diversas que reflejan las conquistas obreras. Desde 1973 a la fecha, su vigencia ha quedado prácticamente en interdicción. En el momento presente, reviste un evidente...