historia
Existe la necesidad de textos más divulgativos, prácticos, completos, concretos en los detalles y matices, de manera que sean verdaderamente útiles, que sepan transmitirnos una base teórica pero aplicable en nuestras andanzas cinegéticas cotidianas.
Así, algunos autores se limitan a intercambiar con estas publicaciones un número determinado de palabras por un importe económico,relegando todo carácter divulgativo o formativo a un preocupante segundo plano, ya que en demasiadas ocasiones se limitan a contarnos de nuevo, con otras palabras, lo que cansinamente ya estamos acostumbrados a leer. Poníamos en aquella conversación como ejemplo la cantidad de texto escrito que podemos encontrar sobre un tema como la predación, centrándose la mayoría de los artículos en lanecesidad de abatir y controlar los córvidos y zorros, tratando únicamente algunos de los medios que se deben emplear y poco más, todo ello de manera excesivamente superficial y poco útil para el cazador.
Pocos textos te informan u orientan sobre el complejo entramado legislativo que ha de conocerse antes de iniciar cualquier control de predadores. Menos aún te intentan convencer de la necesidad deconocer la etología de las especies de nuestro coto, sus necesidades alimenticias, sociales o su comportamiento, de manera que podamos establecer una correcta estrategia tanto en lo referente a las especies presa como a las predadoras, cuya interrelación no es igual, ni en los distintos estadios de desarrollo, ni en las distintas épocas del año.
Tampoco hemos visto en los artículos quetratan la predación que se propongan, como medidas a tener en cuenta, mejoras de hábitat que hagan menos vulnerables a las especies, que se hable de la introducción de superpredadores o el uso de la cetrería, que nos expliquen la rentabilidad de los medios químicos —repelentes que generen aversión mediante el olfato o el gusto como la capsina, el hidrocloruro, el mesurol o cualquiera de losantranilatos, esterilizantes como el diazocolesterol dihidrodoruro que permite el control de una población mediante su tasa de reproducción, o atrayentes como la glicina o el butanotiol—, o que nos aclaren qué puede pasar si en un coto iniciamos un control de predadores existiendo varias especies con distinta etología, distinta capacidad para reproducirse o adaptarse. ¿Si controlamos el tejón o la jinetatendrá influencia sobre el zorro?; ¿puede el control de unos predadores beneficiar a otros llevándonos a unos resultados contrarios a los que buscamos?; ¿quién conoce el efecto liberación dentro de los predadores?
Según profundizamos en la conversación, creo que todos terminamos por llegar a la misma conclusión sobre la necesidad de textos más divulgativos, prácticos, completos, concretos en losdetalles y matices, de manera que sean verdaderamente útiles, que sepan transmitirnos una base teórica pero aplicable en nuestras andanzas cinegéticas cotidianas, que no sólo nos hablen sobre cepos —donde sean legales—, sino que también nos enseñen que su eficacia depende en gran medida de la textura del suelo, que sepan transmitirnos que la ciencia explica que agitar un huevo de urraca mata elembrión, pero que la práctica de campo con la que hemos de conjugar esa teoría ya hacía saber a los viejos guardas la ventaja de no destruir los huevos de los nidos, sino agitarlos, de manera que se evitase una puesta de reposición.
Llegamos a la conclusión de la necesidad de textos con nuevos contenidos, de jornadas, seminarios, cursos o lugares donde aprender, donde formarse e informarse,...
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