Historia

Siempre lo recuerdo y pienso que me hace bien a mi espíritu, a mi mente, el día que decidí luchar por mis ideales, por “la causa” que es el Movimiento Nacional Justicialista.
Recuerdo que fueal día siguiente que derrocaron a nuestro “líder”, yo viajaba en un ómnibus de la línea 166 que iba de Floresta a Belgrano, al llegar a la plaza de Devoto no podíamos seguir, lo impedían gente quefestejaban la llamada Revolución Libertadora y despotricaban a nuestro “líder”. El ómnibus estuvo mucho tiempo sin poder avanzar; recuerdo que sentí un dolor y bronca tan grande que llore mucho y allídecidí y jure luchar y pelear hasta la muerte por mi “líder” y el Movimiento Nacional Justicialista.
Quiero aclarar que de chico ya había abrazado mis sentimientos por el Justicialismo, tenia 14años y estuve en plaza de Mayo el 17 de octubre del 45, en ese tiempo vivía en Perú 1156 con mi abuela que era mi tutora, pues era yo huérfano de mi padre y madre. En los años 47y48 fui a la escuela deAdoctrinamiento Metropolitano y que después fue la Juventud Peronista, también participe en la campaña electoral del 46 en la Unión Cívica Radical Renovadora.
Quiero también decir que nadieinfluyo en mis decisiones y convicciones y de mis ideales doctrinarios; quiero decir que fui un rebelde con causa y si hoy dieran las condiciones y causas de esa época estaría de nuevo en la lucha por misideales que son los mismos del Pueblo Argentino Peronista.
Al primero que hable de mis planes de lucha fue a mi tío Roberto Aparicio que para mi es el padre que no tuve, el me alentó y aconsejóen mis deseos de luchar por “la causa”. Empecé a relacionarme con compañeros que tuvieron los mismos ideales de lucha. Los primeros fueron Héctor Riccio, Julio Callejón, Chela Gómez, Valenzuela,Acosta, Arroyo, Negri, Klein, José Blasco, Julio Troslev y después al llanero solitario Fernando Rojo. También en algunas “acciones” Santucho después no lo vi mas por sus ideales.
Marxistas y...