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1. Planteamiento del Problema
La experiencia temprana del niño con la lectura tiene sus bases primigenias en las relaciones diádicas propuestas por los padres a sus hijos a través de la palabra y desde la mirada del afecto. Así, por ejemplo, Ball (2002) y Torres (2003) afirman que, desde la calidez del vínculo materno y paterno filial, la palabra escrita puede llegar a conquistar un espacionotable en el desarrollo de la disposición del niño hacia la lectura.
Asimismo, Noriega (2006) sostiene que la relación diádica entre la madre y el hijo es tan exclusiva que posibilita el ingreso del niño al mundo del conocimiento de los objetos y del intercambio social. En este sentido, la madre se convierte en la primera mediadora entre la cultura, el conocimiento y el niño, relación en la que elpadre se integra para formar una tríada.
En esta nueva forma de vinculación, la palabra escrita juega un rol representativo como herramienta cultural y de conocimiento ilimitado. Sin embargo, este modelo de vinculación está ausente del entorno de los niños de alto riesgo inferido que conforman el grupo de estudio.
El encuentro temprano y placentero del niño con la palabra escrita no sólo seasocia con el rol de mediadores e intérpretes asumido por el padre y la madre, sino con los modos en que los progenitores llegan a relacionarse personalmente con la palabra impresa, aspecto que vale la pena examinar en contextos familiares donde la práctica de la lectura estética parece estar muy lejos de ser una actividad relevante, y en una población en situación de riesgo
Potencial en lo queconcierne al proceso de desarrollo y Aprendizaje infantil.
Así lo sugieren los datos recabados en una entrevista Realizada a un grupo de siete padres en la unidad de análisis, al revelar que más de la mitad de los progenitores no Experimentan la lectura como una práctica personal o con sentido estético en sus rutinas diarias de vida. Igualmente, los participantes expresaron no utilizar los formatospropios de la cultura oral y escrita (canciones de cuna, juegos de dedos, lectura de cuentos en voz alta, entre otros) como estrategias para fortalecer el vínculo afectivo y comunicativo con sus hijos y para favorecer tempranamente el gusto Mayinoth Toro Vielma y Francisca Josefina Peña González: por la lectura.un espacio para la iniciación temprana en la lectura465



2. justIfIcacIón de laProPuesta
Cifras presentadas en la base de datos de la matrícula de ingreso del Centro de Desarrollo Infantil de Mérida (2007) también revelaron un porcentaje significativo de niños con antecedentes de riesgo inferido que ingresaron antes de cumplir el año de edad (40%), datos que sirven de base para justificar la elección de la
“Escuela para padres” como espacio educativo para la iniciacióntemprana del niño a la lectura a través de sus figuras parentales.
La formación de los padres y de la familia como iniciadores de eventos literarios en el hogar puede llegar a ocupar un lugar preponderante en el desarrollo integral de los niños y, particularmente, en la prevención de problemas asociados con el proceso de alfabetización, tales como la carencia de vivencias personales y socialesacordes con su compromiso como iniciadores de ese proceso.
La experiencia de la lectura, vivida desde el ser interior y mediada por adultos lectores afectivamente significativos (quienes también son representantes de la cultura), se traduce en el ingreso del niño al mundo social,cultural y simbólico que le rodea. En ningún otro momento del desarrollo del ser humano están dadas las condiciones, encuanto a la plasticidad del sistema nervioso central, para que se produzca un aprendizaje y desarrollo tan rápido y fácil como en los primeros años de vida (Ministerio del Poder Popular para la Educación, 2005). De ahí la importancia del rol de los padres-lectores como mediadores entre el niño y la palabra escrita.
Sin embargo, la imagen del padre/madre lector suele reflejar sólo a una porción...