hola
Una pregunta… una pregunta cada día… son aquellas pequeñas frases con signos de interrogación a los ladoslos que mueven mis entrañas y músculos cada mañana, las que me dan el ánimo e interés para enfrentar cada día, o al menos eso pensaba hasta que tuve ese pensamiento que cambiaria todo lo que solía serde mi vida (aunque no fuera muy divertida).
¿Si todo lo que nosotros enfrentamos, nuestros errores, nuestras alegrías y nuestras penurias no fueran más que sueños yuxtapuestos entre sí para formarnuestra vida?, creaciones de nuestras propias mentes.
Esa simple idea descalabro mi mundo.
Comenzó como un día normal, despertar monótono, día monótono.Nada cambiaba, tenía amigos pero no éramos losmás populares solamente jóvenes de primer grado intentando enfrentar cada día con sonrisas falsas y problemas minúsculos en comparación con el enorme mundo, todos discutían por tener el mejorPROBLEMA, ¿era eso lógico? A mi parecer no, yo creía que podíamos discutir sobre lo irreal, lo desconocido, lo místico para cada uno pero a nadie le pareció buena idea, claro ¿a quién le va a interesar hablaralgo que jamás existirá?,” a mi” pensaba yo, pero en un colegio como el mío y con gente como mis compañero tener una opinión diferente equivalía ir a la “contrapuerta”, un ascensor antiguo sin nadainteresante en su interior pero con solo una compuerta ideal para meter a alguien dentro y asustarlo con la oscuridad durante horas.
Termino el día sin muchas noticias que comentar a nadie y...
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