Hola

En un mundo imaginario

La mayoría de la gente dice que el mundo en donde vivimos es complicado, pero la verdad, es que en mi opinión, el problema con este mundo es la sociedad. Está
llena de mentiras, secretos, tristezas, gente falsa, y gente o excluida o amada u odiada; pero al final del cuento, resulta que todos somos iguales, o al menos toda la gente que conozco es igual. Estamoscompletamente perdidos. No tenemos la menor idea de lo que va a pasar mañana, o si de repente la gente te va a parar de
amar, no sabemos que vamos a hacer con nuestras vidas, o que estamos haciendo aquí. Le tenemos miedo al desconocido, le tenemos miedo a la oscuridad, tan solo hay unos pocos que en verdad están dándole importancia a su vida; y créeme, yo no soy uno de ellos, ni siquiera estoy muysegura de si soy una buena persona (o lo que significa ser una buena persona). Por esta razón es que todos nosotros mentimos y pretendemos ser alguien que no somos, por esta razón es que nos levantamos todos los días de la cama y ponemos una sonrisa falsa; porque no sabemos lo que va a pasar cuando la sociedad vea quien eres en verdad (si ni siquiera tú sabes quien eres), le tenemos miedo a todo, yla verdad, simplemente estamos buscando alguna razón, algún amor u objetivo que nos de impulso para seguir, porque si no lo encontramos, quien sabe que pueda pasar.

Era un viernes, estaba en clase de algebra y, la verdad, no solo no estaba poniendo atención sino también estaba extremadamente aburrida. Volteé a mirar a mis tres mejores amigas; Andrea estaba mirando por la ventana completamenteinmersa en sus pensamientos. Elena estaba mirando como estaban sus uñas; Y Carolina estaba escribiendo por su celular, intentando esconderlo para que el profesor no lo viera. Cuando por fin se acabo la clase me acerque a mis amigas y les propuse que saliéramos de el colegio y nos fuéramos a hacer algo más interesante.
Pasamos por un corredor donde no había nadie y llegamos a la puerta de elcolegio. Estábamos subiéndonos a la reja cuando llego el guardia. Andrea nos miro un poco asustada pero Carolina, Elena y yo teníamos claro que este guardia era fácil de convencer, pues tenia un punto débil: las niñas jóvenes, especialmente de pelo mono. Solo por casualidad resultaba que Carolina y Elena tenían el pelo de exactamente el color que le gustaba. Las dos se acercaron al guardia y ledijeron que teníamos que salir por unos minutos y ya volvíamos, le prometieron que al volver íbamos a estar eternamente agradecidas por hacernos ese favorcito. Carl cayó fácilmente como un ratón corriendo hacia una trampa con queso.
Mi vida no era para nada complicada, era rica, podía hacer lo que quisiera y nadie me iba a regañar, bueno además de mis insignificantes papás. Simplemente estaba buscandoun poco de diversión, y, al fin y al cabo mis amigas querían exactamente lo mismo que yo.
Solo tuvimos que caminar una pocas cuadras hasta llegar al bar donde nos servirían sin importar nuestra edad. La verdad seguiría contando esta parte de la historia, pero todo esta borroso. Me acuerdo claramente que empezamos a tomar y reírnos hasta por la noche, luego llegaron unos hombres, yo diría que decómo 18 y nos ofrecieron algo. No tengo la menor idea de lo que paso después, pero, conociéndome probablemente la acepte y mis amigas también, luego, quien sabe que pudimos haber hecho.
Me levanté y estaba en una silla de esperar al bus al lado de mi casa, tampoco tenía la menor idea de cómo había llegado ahí. Todo seguía borroso, mi cabeza me dolía, tenia nauseas, me sentía pegajosa y todo elmundo estaba dando vueltas. Apenas tuve la fuerza para poderme levantar y caminar unos pocos pasos hasta la puerta de mi casa. Cuando por fin llegue, me di cuenta de que mis padres obviamente no iban a estar pues estaban trabajando, como siempre, así que tuve que sacar las llaves de mi cartera e intentar abrir la puerta; mi manos estaban temblando entonces tuve que intentarlo varias veces antes...