hola

Karla Cadena Biagi
Siempre pensé que el día debería de durar más que la noche, y no igual, no las mismas horas, tenemos más cosas que hacer, que horas para descansar.
Desde pequeño escuchaba a mimadre decir que no le alcanzaba el tiempo, la gente se quejaba innumerables veces que le faltaban horas al día.
Muchas cosas por hacer y poco descanso. Incluso a mí, para mí el día duraba poco, justocuando terminaba la escuela, de comer y la tarea, empezaba a divertirme y ya era hora del baño y después ir a descansar, pero siempre me alcanzaba a hacer todo y nunca llegué a quejarme como lo hacíami madre.
Todo cambio el día que en mi tiempo libre me la pasé leyendo historietas sobre el día y la noche, y creo que leí tanto que no tome mi bañó ni cené, hasta que lo entendí
Sabía que yo teníala culpa por nunca haberle puesto atención, pero siempre estuvo ahí ese duende azul, peleando con el duende negro por alguna extraña razón; cuando me acerque para tratar de arreglar lo que estabapasando, justamente pasó, ya era de día y no me alcanzo el tiempo de lograr que esos dos duendecillos dejasen de pelear.
Mi madre no llegó a levantarme como era costumbre y por un momento sentí quedebía acabar con lo que estaba pasando, así que busque por toda la habitación a los duendecillos y no logre encontrarlos, pero claro que encontré algo más, y volví a darme cuenta que no había puestosuficiente atención.
Debajo de mi escritorio había una pequeña puerta azul, casi del tamaño de mi dedo pulgar, parecía tan pequeña y frágil que se podía romper en cualquier momento, no como aquella puertanegra un poco más grande, que no parecía del todo frágil ,así que decidí abrir la puerta azul, y estaba allí el duendecillo azul.
No quiso hablar conmigo, estaba sólo,abrazando aquel cofre que apenasse podía distinguir, y cuando estaba a punto de despertarlo, apareció en la entrada de la puerta aquel duendecillo negro, fuerte y decidido, y entro a quitarle el cofre que el duendecillo azul...