Hola
Hace muchos, muchos años, existió un hombre muy bueno que soñaba con ayudar a la gente a encontrar su amor verdadero. Desde pequeño, el amor había sido muy importante para él. A medida que fue creciendo, se dio cuenta que a muchas personas les era dificultoso encontrar el amor que soñaban y, lo que era peor, que a veces ni existía ese amor, y estaban destinados a la soledad.Y entonces, soñó la manera de ayudar a la gente que estaba destinada a la soledad a fabricar su amor verdadero, y como lo soñó con todo el corazón, lo hizo realidad. Con todos sus ahorros, construyó así la primera (y única) “Fábrica de Amor”. Muchos dijeron que estaba loco, otros tanto no y lo ayudaron a cumplir su meta.
Trabajaron muy duro y construyeron un edificio con muchas oficinas. Lafábrica tenía diferentes dependencias: “Busca el verdadero Amor”, “Fabrica el Amor de tu Vida” y en el último piso estaba la oficina de Mario y su fiel colaborador Tomas.
La dependencia de “Fabrica el Amor de tu Vida” era a la que muchos les costaba llegar, no lo creían posible. Luego de mucho trabajo, muchas críticas y algunos elogios, la fábrica se inauguró. Como de amor se trataba había veces quealgunas personas se enamoraban solo con una mirada.
A quienes estaban destinados a la soledad, la fábrica les parecía el edificio más importante que hubiesen visto jamás. Por el contrario, los que solo iban a buscar a su pareja, veían en ella sólo una simple construcción, cálida y agradable. Dicen que quienes estaban destinados a la soledad, la vida les cambiaba por completo.
Los que soñaban conun gran amor del mismo sexo, aseguraban haber sido atendidos por un angelito que los guiaba con una flecha a su destino tan ansiado.
Y como siempre se dijo que “El dinero no compra el Amor”, Mario jamás cobró por sus servicios.
La fábrica trabajaba día y noche buscando amores correspondidos. Pero, sin dudas, su mayor esfuerzo era enseñarles a las personas que para el amor, también hay quetrabajar y luchar.
Esta era la parte más difícil del trabajo de Mario. La gente llegaba a su fábrica creyendo que, con sólo expresar en voz alta su deseo, el mismo ya podría ser cumplido.
- A un sueño, hay que ayudarlo – Decía siempre Mario- hay que trabajar para lograr lo que uno desea y a veces mucho -Agregaba a sus sorprendidos clientes.
Muchos no lo entendían y se retiraban de la fábrica enojadosy desilusionados. Por el contrario, quienes sí entendían de qué se trataba, trabajaban duramente por encontrar esa persona ideal.
Y así era que podía verse en cada oficina, personas abrazándose, besándose, reflexionando sobre sus defectos para poder hacer felices a otros.
Fueron tiempos felices, donde la mayoría de la gente empezó a entender que el amor verdadero no solo se sueña, se defiende,se sostiene y luego se logra.
Dicen, quienes recuerdan aquellos tiempos, que mientras la fábrica estuvo abierta hubo mas y mas parejas enamoradas, los noticieros daban más noticias buenas que de las otras, ya que todos eran felices y no sentían la necesidad de hacer infeliz a alguien. También aseguran que la gente enfermaba menos y entonces, médicos y enfermeras usaban el tiempo libre que teníanen concretar sus propios sueños. Pero los ahorros de Mario se iban acabando, mucho había invertido y nada ganaba, sin embargo él no pensaba en eso y seguía adelante.
- Deberíamos empezar a cobrar ¿no le parece Mario? –Preguntaba, Tomás fiel colaborador.
- De ninguna manera ¡Cobrar por ayudar a encontrar el verdadero amor! ¡Ni Loco!
- Las reservas se acaban, yo se lo que le digo –Insistió eljoven.
Sin embargo, Mario hizo oídos sordos a lo que decía su colaborador. Era consciente que ya casi no había dinero para sostener la fábrica en marcha, pero su deseo de seguir ayudando pudo más.
Tomás trataba de ajustar lo más que podía el presupuesto, pero sabía que tarde o temprano, en realidad, más temprano que tarde, el dinero se acabaría por completo.
- ¿Has visto Tomás? Esa joven ha...
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