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Estamos acostumbrados a que todas las noticias que llegan de la familia Piqué Mebarak sean acontecimientos felices y llenos de ilusión. El pasado 30 de enero elnacimiento de su segundo hijo, Sasha, creo la máxima expectación. Después los felices papás compartieron imágenes del pequeño, le dedicaron tiernas dedicatorias eincluso el futbolista marcó el primer gol en honor al recién nacido. Sin embargo, no todo son alegrías en el 'reino' de Gerard Piqué y Shakira, ya que el futbolistaha tenido que dar la cara ante la justicia.El defensa del FC Barcelona se ha disculpado –según informa la agencia EFE- por las expresiones "desafortunadas" quededicó a los agentes de la Guardia Urbana de Barcelona, durante la madrugada del 13 de octubre del año pasado, después de que estos multaran a su hermano por unainfracción de tráfico, cometida en una zona de ocio del Port Olímpic de la Ciudad Condal.

Estas disculpas han llegado al juzgado de instrucción número 5 deBarcelona a través de una carta que el futbolista –que no estaba obligado a acudir a los tribunales al ser un caso de faltas- ha entregado a su abogado. En ella muestradiscrepancia con algunas de las frases que la Guardia Urbana le atribuye, pero admite que se equivocó. Reiterando de este modo unas disculpas que ya pidió dos díasdespués del altercado vía Twitter.

El juicio rápido por este caso ha quedado visto para sentencia. La fiscalía y la acusación particular, ejercida por laGuardia Urbana, acusan al internacional azulgrana de una falta de respeto a la autoridad, por lo que piden una multa de 900 euros y de 10.500 euros, respectivamente.