Hola
De pronto arranca la memoria, 9-
sin fondos de origen perdido; 9-
muy niño viéndome una tarde 9-
en el espejo de un armario 9-
con doble luzenajenada 9-
por el iris de sus biseles, 9-
decidí que aquello lo había 9-
de recordar, y lo aferré, 9-
y desde ahí empieza mi mundo, 9-
con un pisodestartalado, 9-
las vagas personas mayores 9-
y los miedos en el pasillo. 9-
Años y años pasaron luego 9-
y al mirar atrás allá estaba 9-
la escena en que, hombrecitoaudaz, 9-
desembarqué en mí, conquistándome. 9-
Hasta que un día, bruscamente, 9-
vi que esa estampa inaugural 9-
no se fundó porque una tarde 9-
se hizo mágica enun espejo, 9-
sino por un toque, más leve, 9-
pero que era todo mi ser: 9-
el haberme puesto a mí mismo 9-
en el espejo del lenguaje 9-
doblando sobre sí elhablar, 9-
diciéndome que lo diría, 9-
para siempre vuelto palabra, 9-
mía y ya extraña, aquel momento. 9-
Pero cuando lo comprendí 9-
era ya mayor, hombre delibros, 10-
y acaso fue porque en alguno 9-
leí la gran perogrullada: 9-
que no hay más mente que el lenguaje, 9-
y pensamos solo al hablar, 9-
y no queda más mundovivo 9-
tras las tierras de la palabra. 9-
Hasta entonces, niño y muchacho, 9-
creí que hablar era un juguete, 10-
algo añadido, una herramienta, 9-
un ropajesobre las cosas, 9-
un caballo con que correr 9-
por el mundo, terrible y rico, 9-
o un estorbo en que se aludía 9-
a lo lejos, a ideas vagas: 9-
ahora, depronto, lo era todo, 9-
igual que el ser de carne y hueso, 9-
nuestra ración de realidad, 9-
el mismo ser hombre, poco o mucho. 10-
José María Valverde, “Ser de palabra”
Regístrate para leer el documento completo.