homo academicus

EL PODER UNIVERSITARIO: JUEGO DE BIPOLARIDADES
Comentario del libro: Pierre Bourdieu, Homo academicus, Buenos Aires: Siglo XXI,
2008 [1ªed. 1984]
Ana Martínez Gea

Cambios de perspectiva. Con tal expresión podemos definir la impresión que Pierre
Bourdieu nos suscita tras culminar la lectura de su trabajo titulado Homo academicus.
Tal vez debido a nuestra carencia de conocimientos acercadel tema o quizá por
ingenuidad, creíamos aséptico el terreno universitario. Mas el presente ensayo abre las
puertas a entornos en los que, aunque con suma cautela, nos adentramos en aras de
descubrir las relaciones de poder que en el seno de la institución universitaria se
suceden. Tan sorpresivo como esclarecedor —a pesar de la obscuridad de algunas de
sus partes— el ensayo estudiadoargumenta el derecho a dudar mediante el trabajo y la
experiencia del autor. Por ende, consideramos que no debería ser tenido por "un libro
para quemar", aunque sus resultados no agraden en demasía a quienes de esta realidad
forman parte. Así pues, procedemos al análisis del estudio desde el punto de vista del
contenido de su investigación.
Aún a riesgo de ser objeto de crítica en el interior de supropio ámbito, Pierre Bourdieu
focaliza la atención de su estudio en el campo universitario francés entre 1968 y 1987.
Obviamente, tal elección implica la superación —en la medida de lo posible— de las
dificultades en cuanto a objetividad que suscita la investigación dentro del doble campo
al que el propio investigador pertenece: por un lado la sociedad y por otro la
Universidad; así como elenfrentamiento a aquellos que consideran al sociólogo un
sujeto «sospechado de antemano de poner las armas de la ciencia al servicio de los
intereses particulares» (Bourdieu 2008: 17). Y es que, en definitiva, el sociólogo trabaja
con sujetos y constituye un sujeto por sí mismo por lo que ¿posee la capacidad de ser
objetivo? Obviamente no de manera estricta, pues juega con la intuición. Perotambién
es cierto que «hacer sin saber del todo lo que uno hace es darse una oportunidad de
descubrir en aquello que se hace algo que uno no sabía» (Bourdieu 2008: 18). Así pues,
aunque el autor pretende llevar a cabo la objetivación del sujeto objetivante, quizá no es
tan imparcial como él mismo cree. De hecho, a menudo queda difuminada la línea que
separa los juicios y los prejuicios. Peropor tal motivo —precisamente— Pierre
Bourdieu es capaz de descubrir ante el lector una nueva manera de entender el engranaje
del campo universitario y, extrapolando, el modo en que funciona nuestra sociedad. Es
decir, el modo en que nosotros funcionamos.
La tesis que el autor defiende es, por tanto, la existencia de relaciones antagónicas de
poder en el seno de la Universidad francesa, que setraducen en la presencia de una
1

estructura jerarquizada —tanto entre facultades como entre saberes y los puestos
de trabajo— en la cual el origen social de los componentes y el prestigio de las
instituciones juega un papel esencial, así como la vinculación del ámbito objeto de
estudio con los campos de poder dominantes: el político y el económico y las
transformaciones habidas alrespecto como consecuencia del Mayo del 68.
Para llevar a cabo su investigación, Pierre Bourdieu se sustenta en la teoría de que el
campo educativo no funciona de manera aislada a la sociedad sino que establece
relaciones con otros campos que en él influyen, entendiendo como campo una estructura
jerárquica organizada cuyos integrantes siguen unas determinadas reglas de juego. Así,
los camposeconómico y político ejercerían gran influencia en el campo educativo
que, a su vez se divide en dos polos: el autónomo, que defiende el valor de la educación
y el conocimiento por sí mismo y el heterónomo, que se moldea a partir de fuerzas
externas. En el terreno universitario, el primer polo estaría representado por las
facultades —en vísperas de la revolución del Mayo del 68— socialmente...