Horario laboral
Cuando hablamos de productividad, o cómo podemos exprimir al máximo nuestro tiempo, es fácil comprender las quejas que enocasiones llegan a nuestra redacción: "todo eso está muy bien, pero a menos que trabajes por tu cuenta, tendrás que pasar un mínimo de 38 o 40 horas en la oficina, hagas lo que hagas". Evidentementecada empresa tiene una cultura organizativa distinta, y puede ser más o menos flexible pero si hay algo en lo que existe un consenso es que la jornada laboral es de 8 horas y que a lo largo de lasemana la empresa va a pagar al trabajador por casi 40 horas de su tiempo. Pero... ¿por qué precisamente 40? ¿Por qué no 50 o 30? Para entender cómo se llegó a esta cifra, deberíamos retroceder hasta lostiempos de la revolución industrial, en el momento en el que los sindicatos comenzaron a ganar peso y a manifestarse públicamente a favor de una reducción de las horas de trabajo. Como todos sabréis, afinales del siglo XIX era bastante habitual que una jornada media pudiese llegar a las 16 horas, por lo que reclamar una jornada de 8 horas parecía no sólo justo, sino uno de los derechos básicos delos trabajadores.
De hecho, en 1919 la International Labor Organization constató que la jornada de 8 o 9 horas era algo había conseguido imponerse en la mayoría de las empresas de la época y unpoco más tarde, en 1938, las famosas 40 horas semanales fueron introducidas en el cuerpo legal de varios países, siendo el Reino Unido y Estados Unidos los primeros en reconocerlas de forma oficial....
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