Huelga del 36

INTRODUCCIÓN:

Dentro de la lucha de clases la historia del movimiento obrero, desde su gestación a fines del Siglo XIX, hasta la actualidad ha sufrido altas y bajas en sus luchas y conquistas.
En enero de 1936, dentro del marco de la “Década Infame”[1] en la Argentina la Huelga General declarada junto con la extraordinaria huelga de los obreros de la construcción (que se prolongódesde fines de octubre de 1935 hasta principios de febrero de 1936) marcaron un punto de inflexión en la historia del proletariado argentino y fueron las luchas más importantes de la clase obrera argentina durante esta época: “¿Es que la vida de un obrero vale menos que una bolsa de cemento?”[2] El recorte del problema que aquí estamos interesados en realizar consiste en ver qué grado deconciencia de clase[3] tiene el movimiento obrero para ese período, y cómo la experiencia adquirida en luchas anteriores le otorga el marco para las nuevas reivindicaciones.
El proceso de Industrialización por sustitución de Importaciones (ISI), que se inaugura con la gran crisis internacional de 1929, se dirigía a un proceso de industrialización limitada (o seudo industrialización, de acuerdo altérmino utilizado por el historiador Milciades Peña) dando lugar al desarrollo de un mercado interno y de una nueva industria de bienes de consumo.
Es en la construcción y en la industria de materiales para esta donde el desarrollo se hace más notable. Diez empresas Multinacionales dominan el rubro, siete de ellas de capital alemán. En la lista figura la Compañía General de Construcciones y laSiemens Baunion, vinculada con el régimen Nazi[4].
Con este panorama nacional e internacional y su experiencia histórica en la lucha, como señalaremos más adelante, acompañados por los tradicionales partidos de izquierda es que se da la lucha contra la patronal de la construcción que trae aparejada consigo una Huelga General en enero del 36, donde se expresa abiertamente la conciencia yla solidaridad obrera previa al peronismo. Por eso mismo, consideramos de relevancia analizarla ya que es una clara manifestación del grado de conciencia de la clase obrera argentina del período. Asimismo, observaremos en nuestras conclusiones la relación de esta con la etapa que se abre en el 45 con el peronismo.

DESARROLLO:

El proceso de conformación del proletariado en el paísdesde finales del Siglo XIX y principios del XX, con la consolidación del Estado, tiene una doble cara: la masiva inmigración europea y la transformación de las relaciones artesanales, ambas conforman el mosaico que dará origen al movimiento obrero argentino.
La formación de la clase obrera estaba condicionada por el tipo de capitalismo que penetró en el país[5] y a su vez por el mercadomundial, que estaba entrando en su fase superior: el Imperialismo. Los años 80´ fueron decisivos en la proletarización de los mismos. Esto se debió, no solo a un proceso endógeno de la sociedad sino, a la necesidad del modelo de producción predominante.
El principal obstáculo para la conformación de una “conciencia de la clase obrera”[6] será la discrepancia entre las diferentes culturas quedesembarcan en el puerto de Buenos Aires. Las diferencias culturales arraigadas en los inmigrantes provocan una heterogeneidad de ideas y culturas que se plasmara en la práctica política[7]. De igual manera, la clase en sí existe con independencia de la toma de conciencia: la formación de la clase no depende exclusivamente de la toma de conciencia, ya que no puede ignorarse el aspecto material.La crisis del 30´ abre aguas a dos procesos bien diferenciados en la historia argentina, como sostiene Ferrer su artículo. [8]. La primera que va desde la formación del Estado Nación hasta la crisis, donde su rasgo principal es ser una economía agro exportadora, donde la exportación sería una variable autónoma que no estaba condicionada por la inversión y el consumo y un segundo momento...