Huesero

Hueseros:
Escuché hace tiempo el término, en un refrán que esbozó mi mamá que reza así: ¨Primero huesero que carnicero¨, refiriéndose a que para triunfar en el ámbito laboral, se debe empezardesde abajo y luego se irá ascendiendo. Yo me encontraba en mi edad de 12 a 13 años, esa edad que comprende un espacio de tiempo en la que se es un armazón de carne, huesos y vísceras que para lo únicoque servía era para acomplejarme y ser marioneta de mis novatas y explosivas hormonas, así que mi centro de atención no era precisamente buscar en Google los significados de las palabras desconocidas,las cuales eran para mí como leer el menú de un restaurant: leo el nombre del plato que, más que el nombre de un plato de comida parece un hechizo, ignoro de qué carajos se trata y sigo leyendo hastaencontrar el nombre de un plato conocido, como ¨Pabellón¨, ¨Bandeja Paisa¨, ¨Sopa de Res¨, ¨Ensalada César¨, o sea vainas normales para mi reducida experiencia culinaria que se basa en arepa conmantequilla y pasta con salsa rosada.
En esta semana, tuve la oportunidad de volver a escuchar el término huesero y como un maniático obsesivo anoté la palabra en mi agenda, todos me quedaron viendo comosi se tratara de Jake, el niño autista de la seria Touch, que repentinamente hace variopintas anotaciones en cualquier lado. Busqué en la enredada red de la información, libros de términoscoloquiales y nada. O mejor dicho, nada que tenga que ver con un huesero y un carnicero, ya que según los textos, los hueseros son una especie de curanderos rurales que se encargaban de la sanación y atenciónde fracturas, luxaciones y otros tipos de trastornos del sistema musculo-esquelético y esta definición no concuerda con la lógica del refrán: no hay lógica en ser curandero de fracturas y despuéscarnicero (?).
Actualmente estoy leyendo el último libro del escritor español Juan Bas: Ostras para Dimitri. Como por arte de un accidente cósmico, en el octavo capítulo de este libro, hace acto de...