Humanos sin vida humana

Son muy pocas la horas libres que nos deja el trabajo, apenas un rápido desayuno que solemos tomar pensando ya en los problemas de la oficina, mirando constantemente un reloj que va en contranuestra, todo parece estar mecanizado, solo atinamos a un ciclo interminable producir y consumir, no importa el que, no nos detenemos.
El ser humano no ha detenido su lucha por seguir siendo humano auncuando la vida que lleva ha dejado de serlo.
El hombre está perdiendo el dialogo con los demás y el reconocimiento del mundo que lo rodea, siendo que es allí donde se dan el encuentro, a posibilidadde amor, los gestos supremos de la vida. Un factor promotor es la televisión, ella nos mentaliza, quedamos como prendados a ella, a tal punto que no solo nos cuesta abandonarla, sino que tambiénperdemos la capacidad de mirar y ver lo cotidiano.
Lo paradójico es que a través de esa pantalla parecemos estar conectados con el mundo entero, cuando en verdad nos arranca la posibilidad de convivirhumanamente y lo que es tan grave como esto nos predispone a la apatía, y esto es porque elhombre se esa acostumbrando a acepar una constante intrusión sensorial. Y esa actitud pasiva termina siendouna servidumbre mental y una verdadera esclavitud
Las personas nos expresamos para llegar a los demás, para salir del cautiverio de nuestra soledad, el contacto con cualquier obra humana evoca ennosotros la vida del otro, deja huellas a su paso que nos invitan a reconocerlo y a encontrarlo
Sin embargo en nuestros días no vivimos relaciones afectivas, se tiene una barrera con aquellas personasque nos “desvían” de la atención, “nos molestan, nos hace perder el tiempo”, siempre con una mentalidad productiva, lo que deja al hombre espantosamente solo, como si en medio de tantas personas opor ello mismo, cundiera el autismo
El tiempo de la vida no era el de la prisa de los relojes sino que guardaba espacio para los momentos sagrados, grandes rituales donde se mezclaba las creencias...