Humberman

LEO HUBERMAN

LOSBIENES TERRENALES DEL HOMBRE
" " '. " '. Historia " · " '. '. '. de la Riqueza " · , . , de ·Ias
I

,t

.

I

•

,. t

•

•

I, t

•

I

,

~,

I

,I

Nacl·ones ' ,. '
• •

•

I

•

I

I

I

•

GY lDITORIAL NUESTRO TIEMPO

realmente eran: guerras comerciales. EI prop6sito de otras fue disfrazado con nombres altisonantes,como a menudo ocurre, aun en nuestros dias. En 16-g0, el Arzobispo de Canterbury dijo: "En todas las Contiendas y Disputas que en los ultimos anos han sobreveriido en esta esquina del Mundo, -heencontrado que aunque la intenci6n ha sido buena y Espiritual, la postrera finalidad y verdadero prop6sito fueron el Oro, la Grandeza y la Gloria Secular". Ragamos nuestra la frase final del arzobispo.Porque resume con nitida exactitud 10 que los mercantilistas se proponian.

El de 1776 fue un ano de rebelion. Un ano memorab~e_ A 108 americanos, Ies recuerda la Declaraci6n de Indepe::dencia, surevuelta contra la politica colonial mercan 'lista de IngIaterra. Y, a los economistas de .todos los paises, la publicaci6n por Adam Smith de su libro Rique'de [as naciones, sumario de la crecienterebeldia contra las tres R del mercantilis~o: Restricci6n, Regulaci6n f Represi6n. Rubo, en el siglo XVIl:1 un gran numero de personas que no estaban de acuerdo ni. con la teoria ni con la practica delmercantilismo. Ese desacuerdo .se basaba en que las sufrieron. Los traficantes querian una participad6n en las grandes utilidades de los privilegiados monopolios. Cuando pretendieron lograrla, fueronexcluidos como "intrusos". Los hombres COndinero deseaban usarlo como, cuando y d6nde quisiesen. Querian aprovechar todas Ias oportunidades que el comercio y la industria en expansi6n ·ofrecian. Conocianel poder que el capital les daba y querian ejercerlo Iibremente. Estaban cansados de "se debe hacer esto'" y de "no se puede hacer aqueIlo". Derechos sobre ... Estaban hartos de "Leyes contra......