identidad personal

Muy buenos días les doy un cordial saludo a todos los presentes.
Primeramente, como problema singular de la filosofía, la importancia y significado de la identidad ha poblado numerosas reflexiones, y su alcance todavía hoy se manifiesta en preocupaciones que pueden ir desde la lógica hasta la filosofía de la mente, e incluso de la ética. En mi opinión, un concepto tal como el que pretenderepresentar el pronombre de primera persona, no puede resultar significativo, ya que en este sentido, entendemos que un concepto tan peculiar como el aquí tratado no escapa a una cierta consideración, en la medida en que es quizás el eje de un discurso sometido a reglas cuyo carácter público es definitorio del valor del propio concepto, la respuesta tradicional a la pregunta ¿Qué es el “YO”?, alhablar del origen relacional del “YO” tratamos de captar su significación en términos de su carácter esencialmente publico, así como de determinar las consecuencias que derivan de un desarrollo que de tal manera, la solución al problema que la pregunta indicada plantea viene de la mano del absurdo solipsismo. En este sentido, los extremos contradictorios de este asunto fueron ya claramente puestosde manifiesto por Wittgenstein filósofo, en su crítica de la posibilidad de un lenguaje privado.
Por otro lado, podíamos dudar de todo menos del “YO” como una sustancia pensante. Este tipo de localización de dicha entidad iba, no obstante, a provocar un rompimiento inevitable en la consideración del individuo cuyos ecos iban a perdurar largo tiempo. El dualismo cartesiano colocaba en unasituación precaria al sujeto, condenándolo a permanecer encerrado en un auto, para poder aceptar y justificar afirmaciones como la cartesiana era preciso aceptar, asimismo, la existencia de “experiencia privada”. Así mismo en el caso del “YO” no era posible, más que admitir la privacidad e identidad de su contenido, dado el carácter de que se le pretendía atribuir, es más, en este asunto parece queposeeríamos la mayor claridad posible, en la medida en que pretendemos localizar el eje de la identidad personal, de modo que es el termino cuya referencia nos resulta más evidente. La última cuestión, es si el significado es algo privado, algo que solamente uno mismo podría entender, o más bien si la construcción está en dependencia de las coincidencias pautadas, regulares, de los individuos.Esta circunstancia afecta particularmente al estudio del “YO”, especialmente cuando nos preguntamos por su referencia. Podríamos decir, en este sentido, que alguna experiencia particularmente intima y directa, causa una instancia, pero dicha palabra parece que no podría poseer significado público en la medida en que no podemos saber si otras experiencias similares a la nuestra causandistintas instancias. De esta manera, la experiencia de la identidad personal se vuelve privada, ya que el significado de tal expresión como la del “YO” estaría fijada para cada uno a través de una definición ostensiva privada. Pero esta posición presuntamente privilegiada del “YO” es absurda.
Se podría decir que la definición ostensiva es la respuesta a una pregunta, es precisa de ella. Es pordecirlo de alguna manera, una culminación significativa y desde una perspectiva de significado “privado” resulta absurdo preguntarse por el “YO”, es por esto por lo que decimos que el discurso sobre el “YO” es lo que da a tal término su significado, esto imposibilita que sea privado, pues precisa de la coincidencia reglada para poder articularse como tal significado, algo que solamente es posible enla acción significativa de un juego lingüístico. La posibilidad de un lenguaje privado quedo sustancialmente desarticulada en los párrafos de Ludwig Wittgenstein. Podemos entender como un primer momento de todo el proceso las experiencias directas o experiencias primarias, algo que se coloca como constituyente a la base del comportamiento. A nuestro juicio, resulta obvio que no estamos hablando...