Ignacianidad

Ignacianidad: ¿el ideal o una realidad?

“Mucha sabiduría unida a mediana santidad, es preferible a mucha santidad con poca sabiduría.”
San Ignacio de Loyola

En el transcurso de la vida existen momentos en los que el centro del mundo somos nosotros mismos, hay otros en los cuales nos sentimos impotentes ante lo que sucede y reconocemos que necesitamos de los demás, pero hay otros que soloson momentos y nada más. La mayor parte del tiempo estamos ocupados, ya sea en nuestros trabajos, estudios o con nuestras familias, el tiempo es tan corto que lo queremos aprovechar al máximo y por eso buscamos siempre algo que hacer, creemos tenerlo todo y que estamos luchando por la felicidad, pero ¿hasta dónde todo esto es una realidad?

Desde niños pareciera que nuestra vida estuvieraorganizada, nos enseñan que debemos estudiar, sacar adelante una profesión, conseguir un buen trabajo, casarnos, conformar una familiar y ser felices, no hay espacio para pensar en algo diferente y aunque los tiempos cambian, en el fondo se guarda la esperanza de no alterar ese orden, nos preparan para un estilo de vida que muchas veces no queremos y se nos impone una tradición social que parece serlógica, pero en el fondo no se piensa en el verdadero sentido del vivir.

Es imposible hallar un sentido a la existencia si no se educa en la manera en que se debe afrontar la vida y es aquí en donde San Ignacio supo orientar su visión del mundo y de la realidad a través de la misión que implica el educar; en concreto, la universidad ha de ser ese lugar en donde se educa frente al sentidoexistencial y por eso la Universidad Javeriana tiene contemplado en sus estamentos generar una conciencia social que conlleve al compromiso y la formación integral.

Es claro que la Universidad Javeriana no se limita a proporcionar a sus estudiantes una serie de conocimientos y saberes sin contextualizarlos en la vida real, si bien es cierto que estudiar los orígenes, fuentes o inicios, así como losprocesos y teorías en que se sustentan los conceptos son relevantes, también es cierto que nada podemos hacer si no los aprendemos a aplicar en el mundo real, es por ello que San Ignacio en su planteamiento del paradigma pedagógico dice que se trata de “ayudar a formar hombres y mujeres para los demás y con los demás” (Henríquez 1999).

No cabe duda que somos parte de ese gran proyecto de SanIgnacio de Loyola, sin embargo, no todos los que somos miembros de alguna u otra forma de esta gran familia, logramos comprender lo que ello significa y el enorme compromiso que tenemos, primero con nosotros mismos como estudiantes y segundo con la sociedad que espera que estemos lo suficientemente preparados para afrontar una realidad que demanda muchas manos, el problema está en la falta de autonomíafrente a la formación que se está recibiendo.

Tal vez muchos logren aprobar los requisitos académicos y posicionarse en el mundo laborar de manera exitosa, lo que debemos cuestionarnos es, ¿realmente existe la capacidad de interpretar los acontecimientos que históricamente están determinando la existencia humana para así mismo tomar acciones que sean coherentes y estén encaminadas a laconstrucción de un mundo mejor cada día?, posiblemente la experiencia de nuestros maestros nos orienten por el buen camino y la puesta en práctica de la pedagogía Ignaciana se intente seguir al pie de la letra, desde esa perspectiva la respuesta sería un rotundo sí.

Pero lo fundamental está en que ese actuar nos permita accionar nuestro espíritu para poder finalmente llegar al encuentro con Dios, soloasí podremos ser seres completamente humanos y conscientes de una libertad que nos brinda satisfacciones pero al mismo tiempo nos exige un compromiso y una constante reflexión, es en la búsqueda de Dios que el servicio adquiere su sentido y los saberes toman su forma pues se convierten en una experiencia significativa capaz de trascender toda posibilidad mundana.

Al referirme al encuentro...