Ilegalidad secretas
Todo militar estaba comprometido conla operación represiva de los centros clandestinos, desde las patotas que se dedicaban a los secuestros, los llamados grupos de tareas integradas por militares de baja graduación, hasta losencargados de la tortura, que tenían las más alta autoridad.
Los victimas eran secuestrados en plena vía pública, en sus casas o en sus lugares de trabajo. Una vez adentro eran sometidos a condicionesextremas de detención. Muchos de los detenidos permanecieron durante meses, e incluso años hasta su traslado definitivo. Ese traslado no era más que un eufemismo porque significaba la muerte.
¿Qué habíapasado con el vecino, compañero de trabajo, el amigo, el hermano, el hijo?, ¿Dónde estaban?, ¿estaban vivos?, ¿estaban muertos?
Los campos de concentración eran de inhumación de cadáveres NN y secretosa voces; la nube de silencio ocultaba los nombres, las razones especificas, pero todos sabían que se los llevabas a los que “andaban en algo” y que las personas desaparecían.
Uno de estos centros masconocido fue la Escuela de Mecánica Armada; estructuralmente compuesta por dos habitaciones que depositaban a los prisioneros denominadas Capucha y Capuchita; además contaba con los cuartos detortura identificado por un cartel que decía “avenida de la felicidad”; cuando alguien era torturado se ponía un disco alto para alto para no escuchar gritos. Su máximo responsable era el almirante Massera.Según los oficiales fue la unidad especializada en el combate contra montoneros; miles de personas fueron privadas ilegalmente de su libertad, torturadas y muertas, utilizando los mismos...
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