Implicaciones culturales en dos pinturas espirituales de yasmín hernández: “sagrado corazón de jesús” y “yemaya”

Juan G. Cortés Villanueva

Implicaciones culturales en dos pinturas espirituales de Yasmín Hernández:
“Sagrado Corazón de Jesús” y “Yemaya”

En este breve trabajo se presentará un comentario en torno a las implicaciones culturales en dos pinturas (“Sagrado Corazón de Jesús” y “Yemaya”) de la artista puertorriqueña Yasmín Hernández.
A manera de organización, dividiremos nuestra exposiciónen las siguientes partes: datos biográficos esenciales de la pintora, contextualización de sus pinturas, descripción de los motivos religiosos (tema) e implicaciones y, finalmente, nuestra valoración personal de la artista como sujeto afropuertorriqueño.
De padres puertorriqueños, Yasmín Hernández nació en Brooklyn, Nueva York, en el año 1975. Estudió pintura en la Universidad de Cornell, en N.Y.Se ha distinguido por la defensa de la justicia social de las minorías, y por su profunda visión de esa diversidad que se da dentro de ese mosaico isleño (racial y cultural) que llamamos puertorriqueñidad. En fin, Yasmín Hernández es una puertorriqueña de la diáspora en los Estados Unidos, muy consciente y orgullosa de sus ancestros africanos.
De acuerdo con la artista, sus obras surgieron araíz de los siguientes contextos. “La imagen del ‘Sagrado Corazón de Jesús’ fue pintado a solicitud de mi madre. Ahora se cierne sobre su altar en su habitación” (traducción nuestra). Esta obra se compuso para el 1994. Mientras que “Yemayá” se creó con motivo de una obra mayor titulada “Alma Boricua: Dioses, Santos y Ascendientes” en el 2000. En esta pieza aparecen tres santuarios, cada uno deéstos está dedicado a cada una de las culturas que intervinieron en el mestizaje puertorriqueño, o sea, la española, la africana y la taína (ver copia de estas imágenes al final de este trabajo).
Las obras pictóricas que nos ocupan en este trabajo, “Sagrado Corazón de Jesús” y “Yemayá”, se inscriben dentro de lo que se conoce como arte sagrado o espiritual. Esto se debe a que el motivo principal decada obra tiene que ver con aspectos claramente religiosos. En la primera aparece Jesús, quien es la figura principal del cristianismo (tanto del catolicismo como del protestantismo). En la otra, surge Yemayá, quien es una deidad de la santería Orishá. Como se puede apreciar, ambas figuras religiosas se circunscriben al campo cultural puertorriqueño, ya que Jesús llegó como legado del proceso decristianización iniciado por los españoles en la época de la colonización; y, Yemayá llegó como herencia de los negros que fueron sacados a la fuerza de su natal África bajo la esclavitud y trasplantados en la Isla por los penínsulares.
La leyenda del “Sagrado Corazón de Jesús” tuvo su origen a mediados del siglo XVII, en Francia. Según se cuenta en la tradición católica, Jesús se le apareció ala Santa Margarita María Alacoque de la Orden de la Visitación de Santa María y le dijo que su corazón se consumía en amor por la humanidad, en virtud de quien se había sacrificado, sin embargo, se sentía muy apenado por el hecho de que la gente se estaba olvidaba de él. Por tal razón, Jesús, a través de Santa Margarita, le ofreció algunas gracias divinas a quienes le oraran con mucha devoción.A partir de entonces se instituyó un movimiento que perdura hasta nuestros días y donde la imagen de ese Jesús con un corazón que se consume se venera en todo el mundo católico.
En la pintura “Sagrado Corazón de Jesús” de Yasmín Hernández, se representa -en el centro de la pintura- la imagen del redentor de la humanidad. La figura de Jesús es la de un hombre blanco, de cabellos largos, barbudoy de mirada perdida, con las manos levantadas, mostrando las llagas que le produjeron los clavos al ser crucificado. En el pecho de ese Jesús aparece un corazón rojo atravesado y sangrante, rodeado por flamas amarillas y encima del corazón aparece un crucifijo dentro de un círculo de color rojo. Todo esto aparece en un fondo oscuro, en el cual se ve una aureola. Sobrepuesto al texto pictórico...