IncaGarcilaso Anatom A De La Historia

LA AVENTURA
OCCIDENTAL
DE INCA GARCILASO
Ignacio Fontes de Garnica

ANATOMÍA DE LA HISTORIA

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Ignacio Fontes de Garnica, 2014.

Anatomía de la Historia, 2014.
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Anatomía de Red

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LA AVENTURA OCCIDENTAL
DE INCA GARCILASO
Ignacio Fontes de Garnica
“Enterradas las pretensiones y despedida la esperanza de ellas, me pareció más seguro y de mayor honra y ganancia no salir de mi rincón, donde con el favor divino he gastado el tiempo en lo que después acá se ha escrito,
aunque no sea de honra ni provecho”.
(Inca Garcilaso de la Vega, Historia general del Perú).

ciedadque tiene ciegamente fijados su centro y sus
ejes.

La profesión religiosa es el nexo que ata a los poetas del manierismo español al elegante Garcilaso de
la Vega, llamado Inca (Cuzco, Perú, 1539-Córdoba, España, 1616), figura de profundo significado
para la historia de la lengua castellana. No tanto por
su poesía escrita, que no es mucha aunque sea buena, sino por la poética que lo animó comopersona y
escritor, que es mucha aunque parezca poca1. Por esa
poética que algunos nos empeñamos en ver ¿o vemos? en quienes, derrotados públicamente, de vuelta a su gabinete doméstico declaran con humildad
a sus próximos: “Eppur si muove” y en paz consigo
mismos, en silencio, dedican su vida nada más que a
la ambición de perseguir su afán.

Póngase el lector que no los tenga, en su veintena.
Y, parasentir una sensación de lo que podía sentir,
empatía, adórnese con sus plumas: descendiente de
príncipe, el poeta Garcilaso pariente, por tanto, del
marqués de Santillana y de Jorge Manrique; hijo
de princesa, de Chimpo Ocllo, descendiente directa de los emperadores incas, hermana del último de
ellos, una mujer tan desconocida como atractiva,
cristianizada como Isabel Suárez (o Juárez), con elapellido de familia de su concubino pero sin el renombre del De Tal..., prerrogativa de la nobleza, e
hijo de un aristócrata guerrero, conquistador y compañero de armas de Hernán Cortés, Diego de Alvarado y Francisco Pizarro: Sebastián Garci Lasso de
la Vega Vargas (Badajoz, ?-Cuzco, 1559). Un padre
que, al contrario que con la madre de su hijo, no
duda en bautizar a éste como Gómez Suárez deFigueroa, no sólo dándole el renombre familiar sino
llamándolo Gómez, el nombre habitual de los primogénitos de su alto linaje extremeño, el mismo del
hermano mayor de Sebastián.

Merece la pena detenerse a conocer el atractivo
profundo de estas figuras singulares de la literatura
española, vivas efigies excéntricas respecto a una so-

1 El filósofo peruano Mariano Ibérico Rodríguez
(1892-1974) dice deél que es poeta “por su capacidad
de configuración y creación (...) y más exactamente es
el poeta del alma incaica en toda la rica variedad de
sus posibilidades”. Aunque, parte de la crítica, como
Menéndez y Pelayo y Azorín, hayan utilizado a veces
esta condición poética para minimizar su dimensión
de historiador. Y aunque como tal, en ocasiones se
deje llevar por la lírica cristiana delconquistador y
dé como ciertas prácticas inexistentes, su capacidad
de historiador humanista es admirable, tanto en los
grandes hechos y batallas como en la descripción de
los oficios de la sociedad e incluso en sus vivencias
y recuerdos infantiles. Un ejemplo anecdótico: uno
podría zurcir, si quisiere..., a la manera de los incas –
que, si no me equivoco, es la actual nuestra– siguiendo las detalladasinstrucciones de Inca Garcilaso: yo
he aprendido a zurcir así.

La aventura occidental de Inca Garcilaso

Un niño educado a la perfección en las sabidurías
de dos mundos, en las costumbres y sapiencias de
lo inca hasta los doce años y luego en la religión y
saberes de lo español, dos mundos a veces enfrentados y otras caminando juntos, unas veces opuestos y
otras complementarios; una educación...