Infancia
LOS INICIOS DE LA PROTECCIÓN A LA INFANCIA EN ESPAÑA (18731918) Marta Santos Sacristán Universidad Rey Juan Carlos
1. INTRODUCCIÓN En estas páginas veremos que la infancia se percibía como una etapa distinta de la vida adulta a la que había que preservar y separar del mundo adulto que representaba la calle y el trabajo. En la visión que nos describían los reformadores sociales y filántropos de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, los niños de la calle o abandonados se perdían dos experiencias de vida primordiales de la infancia: la seguridad de un buen hogar y de una buena familia. En la percepción que tenía la clase media, la infancia ideal se desarrollaba en un buen hogar y alejado de la actividad productiva. Tal aspiración llevó a proporcionar alguna apariencia de este ideal a los niños criados en la ciudad. Pudo ser sólo apariencia porque las realidades económicas hacían difícil excluir del hogar las actividades lucrativas. En este trabajo analizaré, el debate que surgió en esta época entre los reformadores sociales y que propició el inicio de la protección de la infancia. Asumían que la etapa infantil era fundamental para el hombre futuro que será y, por lo tanto, para la sociedad de la que formará parte. Por ello, la importancia de atender a la infancia, tanto por su valor para la familia como para el Estado. Un periodo confuso, que se irá conociendo mejor a lo largo de los siglos XIX y XX. Una etapa débil que hay que proteger, que tiene necesidad de tutela, un campo de intervención y una inversión de futuro. Una etapa de la vida que necesita su espacio propio distinto del mundo adulto. Y por último, señalaré como los juristas interesados en proteger a la infancia del abandono y los malos tratos que recibían de sus padres fueron conscientes del obstáculo que representaba la patria potestad. Por ello, exigieron desde finales del siglo XIX, la reforma del Código civil y del penal para que delimitasen con claridad los casos en los que se podía privar de la patria potestad a los padres. Estas voces, más olvidadas que la de pediatras e higienistas, forman parte del mismo conjunto de opiniones que en las últimas décadas del siglo XIX son agentes y portadores del cambio social que se prolonga en los inicios del XX y que afectan a la forma de vivir de la infancia.
2. LA REVALORIZACIÓN DEL NIÑO. A pesar de las discusiones todavía presentes en las investigaciones sobre la historia de la infancia y de la familia, sobre sus posibles modelos e imágenes diferentes y en especial sobre su cronología histórica, hay una aceptación generalizada que, tal vez a partir del siglo XVI y, desde luego en el siglo XVII, hay un crescendo social del valor y del interés por la infancia que se manifiesta en una nueva aptitud hacia el niño. En la aristocracia y en los grupos sociales instruidos se observaba una atención concreta al niño (ropas infantiles, juguetes, literatura propia, nuevas consideraciones sobre su educación), que podría calificarse como un signo de una evidente diferenciación entre el
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Los inicios de la protección a la infancia en España (18731918)
mundo adulto y el mundo de la infancia. En el siglo XVIII, se acabará de completar la mítica imagen natural de la infancia, una construcción fragmentada y recompuesta entre las nociones de bondad e inocencia y las visiones pesimistas heredadas de protestantes y evangélicos. El Emilio de Rosseau (1762) sería el modelo más significativo. Un escrito cargado de sugestiones que se gestarán a lo largo del siglo XVIII y especialmente en los siglos XIX y XX, que ponía una atención afectiva nueva en la mirada sobre ...
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