Ingratitud Para Vencedores Del Terrorismo
LA INGRATITUD PARA CON LOS VENCEDORES DEL TERRORISMO
EDWIN DONAYRE GOTZCH (*)
General de División EP ®
Por haber transitado el Perú de frontera a frontera, por alrededor de 40 años en el Ejército, incluido en la guerra contrasubversiva, creo interpretar el sentir del pueblo y la indignación de viejos y jóvenes soldados y policías que enfrentaron y enfrentan aún, en especial en los Vallesde los Ríos Apurímac y Ene, también conocido como el VRAE, al terrorismo y al narcotráfico, enemigos del país, de la libertad y la democracia.Con sus aciertos y errores, con el apoyo del pueblo y los Comités de Autodefensa, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional han cumplido honrosamente en la larga marcha de la tarea pacificadora, pero a un elevado costo, porque para muchos fue un viaje sinretorno. Para otros significó regresar mutilados y discapacitados física y mentalmente, por lo que sus madres, esposas e hijos sobrellevan el sufrimiento al verlos inutilizados, y, por si fuera poco, no pocos de ellos y sus jefes han estado o aún están enjuiciados por supuesta “violación de derechos humanos” en el combate contra los asesinos de sectas genocidas maoístas y polpotianas. Muchosveteranos de la guerra antisubversiva que combatieron en las peores condiciones, años después pensaron que con el pujante crecimiento económico del Perú (que con su sacrificio y sangre ellos ayudaron a impulsar derrotando al terrorismo), al fin habría recursos fiscales para elevar en algo sus magras remuneraciones y pensiones, que están entre las peores de América Latina. Pero no. Se equivocaron.
Y esque al retornar de los destacamentos que se habían forjado en esa confrontación –el Frente Huallaga o el Frente Mantaro por ejemplo, o de los antiguos Comandos Político-Militares, como el de Ayacucho– pronto se dieron con la sorpresa de que no les esperaba el agradecimiento, por haber devuelto la paz a la Patria amenazada, sino un paquete de ingratitudes de un Estado infiltrado por elementos queprofesan un odio enfermizo a la Fuerza Armada o son marionetas de poderes supranacionales.
El pueblo civil y el pueblo en armas Hay que enfrentar de una vez la verdad sobre este tema que se ha trocado ideológico. Para nadie es un secreto que todo el siglo XX, e incluso antes, el pueblo civil y el pueblo en armas (especialmente el Ejército), aunque unidos por el sentimiento patrio, caminaronmuchas veces por cuerdas separadas. Y es que de un prejuicio civilista, que antes fue contra los legionarios de la independencia y después contra los sobrevivientes y héroes de la Guerra con Chile, se pasó primero al veto y después al odio en la época moderna del Perú, sobre todo después del alevoso crimen contra el general Sánchez Cerro a manos del APRA en la primera mitad del siglo pasado.
En lasegunda mitad, cuyas consecuencias las vivimos, vino el ingrediente ideológico, cuando sobre la base de los viejos prejuicios, vetos y odios se instaló, en la mayoría absoluta de los centros de formación superior, llámese Universidades y Normales, y lo que es peor, como una política de Estado, la primacía de la enseñanza del marxismo leninismo y de la lucha de clases en sus diversas variantes,incluido la genocida de Abimael Guzmán, en la Universidad de Huamanga, para efectos de la comprensión de la historia del Perú y el estudio de la realidad nacional. Y las mismas circunstancias en el magisterio nacional, encargado de la enseñanza primaria y secundaria, a cargo de sectores extremadamente radicales del sindicato magisterial llamado SUTEP.
Durante decenios se encargaron de inocular elodio ideológico, “de clase” le llaman, en las aulas universitarias y en el mismo magisterio nacional, obra de los sectores extremistas y sediciosos. Son éstos los que han inculcado en nuestros hijos esas ideas de odio predicando que la Fuerza Armada es el brazo armado, el “perro guardián” de la oligarquía, la burguesía y el imperialismo, cuando cualquier investigación seria concluiría que no ha...
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