Injerencia Norteamericana
Tras los fracasoscomunicativos de la invasión de Irak, se volvió a la retórica humanitaria que tantos buenos resultados había dado tras la guerra del Golfo (Kuwait-Irak). El militarismo de los neocoms frente a la piel deoveja del uso espurio de los Derechos Humanos. Y está claro que vende mejor el puño de hierro con guante de terciopelo.
Lo que se busca en cualquiera de los casos es romper la soberanía y hurgar enla cerradura de la no injerencia con la ganzúa de la supuesta filantropía. La coartada de los intereses humanos por encima del principio de No Intervención consagrado en la Carta de las NacionesUnidas (Art.2 P.4).
En cuanto a la guerra, el melón se abrió con el «Derecho de Injerencia» formalizado por la resolución 43/131 de la Asamblea General de la ONU, impulsada por Bernard Kouchner y MarioBettani, que constituyó una suerte de excusa legal internacional sobre la que se impulsó una nueva intervención-tipo basada en un supuesto altruismo.
El punto de partida fue la Resolución 688 delConsejo de Seguridad de la ONU del año 1991 que supuso la imposición de una zona de seguridad y varias zonas de exclusión aérea en Irak, que permitían bombardeos y acciones de castigo. Parecidaargumentación a la usada para los bombardeos de la Operación «Deliberate Force» en Bosnia Herzegovina (1995) autorizados por las resoluciones 770, 816, 836 y 958 del Consejo de Seguridad de la ONU y que diopaso a la acción unilateral de la OTAN contra Yugoslavia en 1999.
Como señalaron algunos de los apologetas de la injerencia humanitaria, la zona de exclusión en Irak se convirtió en un precedente...
Regístrate para leer el documento completo.