Inkas Si, Indio No

NUEVAMENTE, INKAS SI, INDIOS NO
Reflexiones en torno al inkanisno, cusqueñismo y protección del patrimonio.
Antrop Raúl Pacheco Herrera
El año 1995, Cecilia Méndez, escribió el ensayo "Incas si, Indios no : Apuntes para el estudio del Nacionalismo Criollo en el Perú" , uno de los principales trabajos sobre el tema de la construcción de nuestra identidad y los avatares históricos de nuestrosconflictos étnicos, ensayo que hoy cobra nuevamente vigencia a raíz de la arbitraria y desatinada colocación de la efigie de un Inka en la pileta de la plaza de Armas del Cusco. Quienes defienden su permanencia, entre ellos el alcalde y sus técnicos ,argumentan entre otros motivos, que es una manera (al parecer la única) de reivindicar la imagen, figura y memoria del Inka, antiguo gobernante deestas tierras y que quienes se oponen a su permanencia no aman al Cusco y son enemigos de su cultura.
Será difícil encontrar a través de la historia disquisición lógica más absurda que esta, quizá sea comparable con aquella que decía en tiempos de la colonia que los indios no tenían alma o aquella que en tiempos de la hacienda decía que el mascar coca embrutecía a los indios. El derrotero paraentender este absurdo lo encontramos en el ensayo de Méndez, en el que se concluye afirma que es una característica del nacionalismo peruano del S. XIX y del S. XX, decir que yo siento orgullo por los inkas, pero no tengo nada que ver con los indios, es decir sentimos orgullo por quienes construyeron Machu Picchu pero desdén por sus descendientes, quienes hoy viven en condiciones de extrema pobreza,analfabetismo, desnutrición y discriminación.
Hoy al ver la Plaza de Armas del Cusco, su pileta y su entorno, nos viene inmediatamente a la memoria esta frase, "Inkas Si, Indios no". Un inca de bronce, dorado, impetuoso, históricamente mal esculpido, mira al infinito, mientras a su alrededor policías municipales corretean y expulsan agresivamente a personas de humilde condición que intentanvender algún souvernir o lustrar zapatos. Circundan a la plaza los mejores ejemplos de destrucción de nuestro patrimonio en los emblemáticos casos de la calle Loreto, del Hotel Marriot y en calles aledañas mendigos quechuas piden una moneda a cambio de algo de música o de una fotografía. Algunas cuadras mas allá descendientes inkas sobreviven como cargadores en los mercados de San Pedro, Ccascaparo yen el turístico "camino inka" campesinos del Valle Sagrado reducen su condición humana como porteadores, cargando más de 30 kilos para que los turistas hagan el recorrido con mayor comodidad.
Y es que el Cusco, la antigua capital del Tawantinsuyo, luce alarmantes indicadores de pobreza, con un 30% de desnutrición crónica infantil, mas de 100,000 analfabetos en sus zonas rurales, una capacidadde comprensión lectora que apenas supera el 15%, acompañado una ausencia de políticas de interculturalidad y un racismo constante y cotidiano, que conlleva a una diaria pérdida de identidad, además, claro, de una hermosa estatua al Inka que lo magnifica y glorifica. Orgullosos de lo inka, pero de espaldas a la realidad de lo quechua.
En este debate que es necesario diferenciar tres conceptos:inkanismo, indianismo e indigenismo que al parecer son confundidos con desmedida irresponsabilidad en esta polémica, y aunque la discusión debiera ser enteramente patrimonial, los argumentos por parte del alcalde y sus técnicos, nos llevan a tener que hacer estas aclaraciones históricas y antropológicas. Fue Uriel García quien hizo las primeras precisiones entre "incanidad" e "indianidad" y quienpostula que lo inka es sinónimo de inercia y lo indio de posibilidad y potencia. Fue luego Luis E. Valcárcel quien afirmó que " el indianismo ha pasado ya del plano racial, biológico, para adquirir su valor en el mundo psíquico" , es decir termina siendo una construcción mental. EL influjo de lo indio es tan poderoso en el Perú que el no se libran los cuatro quintos de su población" decía...