Inmaculado Al Rock
Al conectar mi guitarra al amplificador, me envuelvo en un mundo de metáforas y lúcidas mandrágoras que me gritan por placer sonoro. Puedo atravesar la diócesis ydeclararme impuro y sofisticado.
Son atmosferas inmaculadas que erectan las sapiencias de una ideología en común. El Rock.
Al toque, agrego un sonido fuzz, que si comparáramos sería comoagregar la sal y la pimienta a un platillo determinado. El sonido es viciado, seco y sucio, arquetipo para tocar rock/blues o riffs de guitarra marcados y potentes.
La batería de mi fielamigo es árida y estremecedora. Con sólo tres platillos basta para avivar cada acorde plasmado y enriquecer cada aplauso.
¿Qué sería de la música sin su noble caballero?, ¿A qué nossabría el mambo, cha cha cha, rumba, sin ritmo? A nada verdad? Es por eso que el bajo influye y es necesario para toda música desde contemporánea, abstracta, rumbera e incluso sacra.Inmiscuir estos tres pilares nos hace crecer y elevar nuestras mentes a infinidad de situaciones, lugares ó paradojas como ambientes lacustres, bucólicos, bélicos, entre otros.
Delante denosotros: un universo entero de personas. Público explayado a concebir conciencias sonoras que les permitan expresarse y ser feudos de sus sentidos. Alimento perfecto para un músico es elpúblico. Qué sin él no sería nada, sólo un mísero idólatra frustrado que no expandiese su popularidad y fama.
Los ánimos se elevan y la música se monta en la anarquía de los vientos parala seducción de abismos. Se comienza a dar rienda suelta al libre albedrío de pensamientos y emociones. Fiesta pagana, mantel bucólico puesto en un bacanal, oscurantismomedieval. Eso para mí es un show, el espectáculo donde todo debe lucir, donde las pasiones se unifican en la gloria de los placeres y sólo el súbito momento es el que importa e impone.
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