Inocente Jason Quinn

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Índice
Argumento.................................................3
Capítulo 1………………………………….4
Capítulo 2………………………………...12
Capítulo 3………………………………...17
Capítulo 4……………………………...…35
Capítulo 5……………………………...…45
Capítulo 6……………………………...…67
Capítulo 7……………………………...…99
Capítulo 8…………………………….…107

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Argumento
Deborah sabía que Mark la engañaba.
No podía ser inocente del horrible crimen hacia elque todos los indicios
apuntaban. Pero durante los años que Mark estuvo en prisión, su corazón se
empeñaba en seguir sintiendo algo que no sabía muy bien que podía ser.
Mientras, le odiaba por lo que había hecho.

Capítulo 1

M

ark O'Hagan era un joven sociable y animado. Aunque llevaba menos de
dos meses en el instituto Mnnr Grange, ya había hecho un montón de
amigos e incluso estaba formando unabanda de rock con sus compañeros
de clase. Se había mudado recientemente a la casa de su padre en Leeds, Yorkshire,
desde Irlanda del Norte después de la reciente y trágica muerte de su madre. Mark
tenía el corazón destrozado y a la vez estaba lleno de una impotente rabia, pero la
excitación de mudarse a una nueva ciudad y a una nueva vida le había ayudado a
aliviar el dolor.
Mark era bajo parasu edad. Con dieciséis años, parecía un joven de catorce. Su
estatura era una fuente constante de preocupación para él, porque aunque estaba
agraciado con una piel inmaculada, los hermosos rasgos de su madre y el abundante
cabello oscuro y ojos verdes de su padre, tenía muy poca seguridad con las chicas.
—Ninguna chica en sus cabales saldría con un enano —le decía a su padre.
—No te preocupes,hijo. Todavía tienes que crecer mucho.
Mark no tenía una fe absoluta en la predicción de su padre. Otros chicos que eran más
jóvenes que él eran más altos. No era justo.
El miércoles era su peor día de la semana, después del lunes, por supuesto,
especialmente por la mañana, cuando tenía la clase de matemáticas seguida de
ochenta minutos de geografía con el bizco del señor Hampton.
El sol de mayo sefiltraba por las ventanas altas de la clase, cubriendo a los chicos y
chicas con un velo de aburrimiento y dejándolos en un estado de suave
adormecimiento. Mark se dio un pequeño pellizco en la mano, tratando
desesperadamente de espabilarse. No era que encontrara el discurso del señor
Hampton sobre la guerra de las Dos Rosas particularmente interesante, pero el
profesor podía sorprenderle dandocabezadas, y la semana anterior le había castigado
a quedarse dos horas después de las clases.
Para mantenerse despierto, adormilado por el sol inusual para esa fecha y el
despiadado murmullo del profesor, se puso a inscribir sus iniciales sobre la ya
grabada tapa del pupitre. Terminada la tarea, se volvió hacia el otro lado de la clase y
miró fijamente, pasmado, a la más maravillosa chica que jamáshabía visto.

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Deborah Emmerson, ¡qué belleza! Ella era como una estrella de cine o como una
diosa. Era la perfección. Allí estaba ella sentada, alerta y atenta a las enseñanzas del
profesor, bastante después de que sus compañeros hubieran agotado su capacidad de
atención. Mark estaba loco por ella desde el primer día de la escuela; sin embargo, no
le había dicho más que un tímido "hola".
Lamodorra fue sustituida por un estado de excitación mientras estudiaba la textura
lechosa de su piel. Su cabello, de un suave y brillante color miel, descendía
lujuriosamente hasta sus hombros. Sus grandes ojos grises, fríos y transparentes, sus
labios llenos y sensuales hechos para besar. ¡Sus labios! ¡Sus preciosos labios!
Se recreaba en la insoportable y deliciosa angustia que ella siempre causabaen él.
Sabía que su amor permanecería para siempre sin respuesta, porque nunca
encontraría el valor para pedirle que saliera con él. Su descorazonamiento no le
impedía hablar de su belleza con sus amigos. De hecho, él raramente hablaba de
nadie más. Era muy consciente de que probablemente se estaba convirtiendo en algo
obsesivo, pero no podía evitarlo. Hablaba largo y tendido de su belleza, de...