Inquebrantable Mi Historia A Mi Manera Rivera Jenni
1. ¿No eres tú la vieja de El Cinco?
2. Ser una Rivera
3. Subir al escenario
4. Una pequeña empresaria
5. Mi primer amor
6. ¿Por qué lloras, mija?
7. Mi escape
8. Dame la serenidad
9. Dios no da más de lo que podemos soportar
10. ¿Dónde están mis malandrinas?
11. La hermana de Lupillo Rivera
12. Desbordante
13. La Gran Señora
14. Pinche pelón
15. Dos años más
16. Alzar la voz
17.Mírame
18. Te llevaré a casa
19. «Celibato» y videos porno
20. ¡Beso!, ¡beso!
21. Adiós
22. Mi vida es una telenovela
23. La mariposa de barrio
Agradecimientos
Fotograf ías
Nosotros queremos dedicarles este libro a ustedes
Gracias no sólo por tomarse el tiempo de leer la historia
de la vida de nuestra madre, pero por permitirse ser
inspirados por una mujer que fue amada y admirada.
Unagradecimiento muy especial a los fans de nuestra
mamá, porque nosotros sabemos que su vida no habría
sido tan bendecida, si no fuera por el amor y el apoyo
que ustedes le brindaron.
Los queremos, Los soldados de Jenni: Chiquis, Jacqie,
Mikey, Jenicka y Johnny
1
¿No eres tú la vieja de El
Cinco?
Ahora estoy, entre luces hermosas,
mas cuando estaba sola,
sé que Dios me cuidó.
—De «Mariposa de Barrio»Domingo 26 de enero de 1997.
La noche comenzó en El Farallon, un club popular en
Lynwood, una ciudad en el condado de Los Ángeles,
California. El Farallon es donde uno va a pasar el rato
con sus amigos y a perderse en la música, olvidándose
de todo por unas pocas horas. Ahí fue donde conocí a
Juan López, mi segundo marido, después de que
nuestras miradas se cruzaron en la pista de baile. Lo
másimportante es que El Farallon era donde muchos
cantantes del género regional mexicano iniciaron sus
carreras. Y fue donde decidí grabar el primer video
musical de mi canción «La chacalosa».
Mi padre tenía una relación de negocios con Emilio
Franco, el dueño en la industriao con . En una
ocasiónde El Farallon. Franco nos dio permiso de
grabar el video en el club antes de que las puertas se
abrierana las 9:00 pm. Mi padre, conocido por
muchos como Don Pedro Rivera, era uno de los
productores más reconocidos de música regional
mexicana. Siempre había sido mi más grande apoyo,
especialmente en esos tiempos cuando yo estaba
luchando para darme a conocer. Él tenía planes de
comprar tiempo comercial en radio y televisión para
este video y promover «La chacalosa».
En ese entonces todavía no ganabamucho dinero con
mi música. No querían tocar mis canciones en la radio
porque me negaba a ser la típica cantante latina.
Debería haber sido más joven, más delgada, más
calladita, más tranquila, más tonta. En la comunidad
latina, las cantantes femeninas tenían que ser hermosas
y flacas, y su música sin sentido. Las cantantes latinas
eran vistas, no escuchadas. Pero yo no era una belleza.
Decíanque era gorda y que no podía cantar. Cantaba
corridos pesados, ¡con ovarios!, y creo que esto
intimidaba a los hombres. No había ninguna otra mujer
cantando corridos. ¡Era lo mismo a una mujer
rapeando! Decían que las mujeres no éramos lo
suficientemente fuertes o auténticas para cantar sobre el
mundo peligroso de los narcotraficantes. La gente en la
industria trató de hacerme cambiar. «Si quierestener
éxito en este género», me dijeron, «tienes que hacer
esto y lo otro». Un montón de mujeres se dejaban
coger para que su música fuera tocada en la radio. ¡A
la chingada con eso! Yo no lo haría. Quería triunfar a
base de mi talento o no triunfar en absoluto.
En el tiempo en que estuvimos grabando el video de
«La Chacalosa», yo trabajaba como agente de bienes
raíces para mantener a mis treshijos y a mí. La música
era algo secundario. Juan López, el hombre con el que
más tarde me casé, estaba cumpliendo una pena de
prisión de siete meses después de ser acusado de
contrabando de inmigrantes. Lo iban a dejar libre en
tres semanas. Ya que yo no quería ir sola, mi hermana
Rosie y su amiga Gladyz me acompañaban cuando salía
por la noche a algún concierto de música. Esa noche se
sentaron...
Regístrate para leer el documento completo.