Inserción Sindical De Montoneros

MONTONEROS E INSERCIÓN SINDICAL

El contexto histórico
El proceso revolucionario abierto a partir de la acción de masas en 1969, tiene al Cordobazo como punto más visible de inflexión. Pero no es el único, se debe entroncar en un proceso precedido por las numerosas huelgas de 1968 (Peugeot, Good Year, etc.) y acontecimientos que lo anteceden como el Rosariazo de mayo o posteriores, como elRosariazo de setiembre o el Viborazo de 1971. Hasta 1973, se suceden múltiples acciones que contienen la sustancia del Cordobazo: la irrupción política de las masas con tendencia a la acción directa insurrecional, no mediada por lo institucional (burocracia sindical, relaciones con el gobierno, etc.). Es la algidez de la lucha de clases en las calles, el surgimiento de la clase obrera como actoreconómico y político del proceso, en un contexto de crisis económica constante(1). Esto demostraba el fracaso del reformiso por la incapacidad de la estructura de acumulación capilista argentina de incorporar a la masas obreras (imposiblidad material ante las limitaciones del mismo capital para reproducirse y las necesidades contratendenciales para contener la caída de la tasa de ganancia víapauperización y aumento de las tasas de explotación) y a fracciones de la pequeña burguesía (éstas úlitmas venían radicalizando su accionar por fuera del sistema institucional y conformando organizaciones políticas y político militares durante los años `60).
Las masas en las calles exigían un replanteo táctico y estratégico de dichas organizaciones en el comienzo de la década del `70. Un heterogéneocuadro de programas, ideas, estrategias y tácticas enmarcaban a organizaciones, movimientos y partidos surgidos en los `60. El espacio de la “Nueva Izquierda”(2) estaba ocupado por “peronistas de izquierda” (organizaciones político militares comoMontoneros, Fuerzas Armadas Revolucionarias(FAR), el “Peronismo de Base” con su brazo armado, las Fuerzas Armadas Peronistas) e izquierdas marxistasguevaristas ( Partido Revolucionario de los Trabajadores y su brazo armado, el Ejército Revolucionario del Pueblo (PRT-ERP), las Fuerzas Armadas de Liberación (FAL), entre otras), trostikistas (Partido Socialista de los Trabajadores (PST), Política Obrera (PO)), y maoístas (Partido Comunista Revolucionario (PCR), Vanguardia Comunista (VC)).Las escisiones y la novedad conformaron la dinámica de lapolítica y la relación dirigentes-masas, y exigían constantes interpretaciones de una realidad que aceleraba sus tiempos.
El régimen militar inaugurado en 1966 se econtraba asediado: ni la renovación de su personal político (Onganía-Levingston-Lanusse) había podido reestablecer la dominación. La crisis de hegemonía (que venía acumulando pendularmente regímenes y gobiernos) exigía la salidainstitucional, el retorno al “juego de iguales” que implicaba la vuelta democrática, como instrumento de dominación burguesa por excelencia en torno a relaciones capitalistas que ya habían expresado cualitativamente todos sus elementos en la estructura económico y social nacional. En ese sentido, el “Gran Acuerdo Nacional” formó parte de una estrategia burguesa de recomposición de fuerzas y control delmovimiento peronista dentro del orden institucional (principalmente de las fuerzas más radicalizadas de la “izquierda peronista”). Además, obligó a analizar las estrategias y tácticas de las diversas fuerzas entroncadas en programas marxistas. En ese sentido, como indica Hector Lobbe, el “GAN le permitió a la dictadura lograr un exitoso desacople de la acción,…de las distintas fuerzas de izquierda, tantoperonistas como marxistas”(3), pero también, “desde las distintas perspectivas partidarias de izquierda se abría una etapa en la que podía crecer su influencia entre la clase trabajadora y por lo tanto, se incrementó su militancia sobre ella(4). Es sobre último que intentaré rastrear la relación de Montoneros con la clase obrera, pero partiendo de un encuadre historiográfico que plantea las...