Introduccion a la metodologia del derecho

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Luis Afranio Gomez

Introducción A La Metodología Del Derecho

PROLOGO

El título Metodología del Derecho encierra una insoportable vaguedad, pues cuando se abre una obra con este rótulo no se sabe, exactamente, qué va a encontrarse: una exposición crítica de las corrientes metodológicas? Un estudio histórico de las mismas? Una disquisición filosófica sobre el fundamentoespeculativo de las direcciones metódicas? Un análisis técnico de los procedimientos jurídicos?

Esto, en los mejores casos, en algunos otros es posible hallar otras tendencias cuyo interés no los hace útiles para aclarar el significado del título.

Es solo una primera dificultad y, por cierto, la menos importante. Tras el problema del título aparecen, como cabeza de Gorgona, las razones delcontenido del tema, el sustrato lógico, dogmático, técnico, filosófico, académico, histórico, comparatista y aún biográfico, que impulsan y alientan a escribir una obra con título semejante, casi proteico, por la posibilidad de los numerosos matices que su fundamento puede tomar.

Uno y otro aspecto se precisan en contornos más específicos cuando se hace un examen somero de algunas de las definicionesde método jurídico. Con posterioridad podría preguntarse, todavía, en qué consiste el método jurídico y seguramente se encontraría tanta perplejidad como antes de haber conocido las definiciones tales.

Las razones de esta situación no interesa discutirlas aquí y tampoco serán tratadas en este trabajo, pero el lector puede inferirlas, con mucha certeza, de la lectura de temas relacionados, v.g.la discusión sobre derecho y ciencia, en el capitulo primero. Lo que sí cabe esperar de esta obra es una precisa indicación de lo que debe tratar un libro de metodología del derecho, que aspire realmente a justificar el título. Este trabajo aclaratorio es uno de los objetivos fundamentales de este estudio y su remate propio, como podrá constatarse.

Para poder llegar a este resultado ha sidonecesario dar paso a un aparato de clarificación de conceptos que no tiene ninguna pretensión: la armazón conceptual de esta obra es intencional e inevitablemente modesta, pero también voluntaria e ineluctablemente rigurosa. Es posible que lo uno compense lo otro, en aras de un resultado esclarecedor. Nuestro punto de partida es el hecho de que el derecho no es una ciencia, por lo cual el métodojurídico de modo alguno conduce a encontrar verdad alguna, como se ha pretendido, con grave desconocimiento de elementales principios epistemológicos: en el derecho no hay nada atinente a la pretensión de verdad como sí ocurre en las ciencias propiamente dichas. Sin embargo, para plantear este asunto se requiere una considerable discusión, no exenta de dificultades, dada la terca, intransigente yparcializada actitud de la mayoría de los juristas. El alegato sobre la no-cientificidad del derecho es rechazado de plano, desde hace más de cien años, con los más controvertidos, fútiles y tautológicos argumentos, sin que haga claridad la observación de que aceptada la no-cientificidad del derecho nada pasa con la vida jurídica, pues esta denuncia no influye para nada en el trabajo de los juristas,salvo quizás la capitis diminutio que algunos puedan sufrir en su fuero interno, en sus convicciones intimas, pues para ellos su trabajo es ciencia en el más exigente sentido. Este aspecto subjetivo, como es apenas obvio, no tiene por qué ser tenido en cuenta, pues no agrega nada a la discusión fundamental a la cual accede.

Planteado que el conocimiento jurídico no es ciencia, lo elementalera exponer una posición sobre la aseidad de este conocimiento, lo cual ha sido hecho, en forma ecléctica, al sostener que es una técnica (continente) al servicio de los intereses políticos de las clases dominantes (contenido) de una sociedad. Es, dicho de otro modo, un continente sui generis, cuya aseidad técnica puede examinarse en detalle en cualesquiera de los sistemas jurídicos existentes,...