Invite a tus amigos
Además, san Antoñito es como persona de la familia, en esa finca de la Ñoca. Se le cuentan las cosas que pasan, se le reza a diario, se le quiere con todo el corazón, se le piden cotidianas mercedes y hasta ocurren sus disgustillos con él cuando no se porta lo bastante generosos en los favores o milagros que se le piden, y ocasiones ha habido enque la esposa de Pancho Pilarte le haya hechado en cara a su querido santo los boyos gastados anualmente en su fiesta; esto –repito- cuando alguna vez el santo debía haberse portado mejor… como, por ejemplo, cuando el novio e la Payita se fue a la revolución y no volvió nunca. Pobre Goyo, a quien un riflero lo blanqueó en las lomas de Colorado.
Y esto otro que pasó, comienza temprano un días demayo de mil novecientos veintitanto: muy con tiempo el devoto y precavido Pancho tomó su bote y se vino rio abajo hasta el medio-queso, y en seguida, medio-queso arriba, se fue subiendo a canaletazos vigorosos, hasta llegar a la finca del general Candela, contra los mojones de Costa Rica; allí vivía una familia que además de ser amiga de nuestro hombre era también devota de San Antonio y criabachanchos, detalle este que era lo que principalmente había hecho a Pancho emprender tal viaje que en redondo le cogería el día entero. En llegando, se fue de una vez al grano; apenas un “ideay” muy cordial y la respuesta de rigor a las preguntas cajoneras por la Paya, la payita, Toñito, Panchito, la Inesita y Tatín, que en escrupulosa sucesión representan la esposa y la prole de Pancho. Y acontinuación…
-Pues yo vengo por un chanchito para San Antonio, y ya saben que los espero el 13, a todos: desde el general, si ya subió hasta al Milor… pero me le quitan unas pulguitas para ese día.
-Te equivocás con el Milor no se consigue una pulga ni para remedio, si me dijeras garrapatas…
-Bueno, que me dicen del chanchito?
-Ajáh… Te gustó el del año pasado!
-Malo no estaba, pero mecostó mucho sebarlo.
-Ahora tenemos uno de media ceba, caponcito y que si lo ves te lo llevás.
-¿Y cuanto llora?
-Eso eso es lo de menos. Viendo a la dama se enamora el pretendiente.
-Bueno y decime que hubo del sancarleño que le salió a la Payita para semana santa? Se entendieron?
- Si el tata es el último que sabe las cosas…
-Bueno, hablemos lo del chancho. Me gustaría masgrandecito que el del año pasado.
- Pues vos decís, pero aquel que te llevaste no parecía moto.
-No digo yo que no, pero les diré que hizo falta chancho… Como ni un solo de los invitados se quedó sin llegar, pues hizo falta chancho.
-¿Lo querés mas grandecito ahora, pues?
-Francamente, me gustaría más grandecito. Es que este año pienso invitar al policía de Costa Rica, a don Valentín, a doñaMaría, a don José de doña María... esa gente come!
-Pues vamos al chiquero y vos escoges. Tenemos una chanchita que si la vez te enamorás; pero si pensás invitar a tanta gente, el remedio es que te lleves dos chanchos.
-¿Acaso sólo va haber chancho?
-Es verdad que no solo chancho das vos, y entonces con uno más grande podes tener, vamos al chiquero.
Y el trato quedó ajustado sin mucho...
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