IQUICHANOS

El poder del nombre, o la construcción de identidades étnicas y nacionales en el Perú: Mito e historia de los Iquichanos. Cecilia Mendez
La rebelión de 1826 y 1828 (Simón Bolívar, Andrés de Santa cruz, Manuel Salazar Baquijano, José de la Mar) protagonizada por arrieros, hacendados, curas y campesinos de la provincia de Huanta, en alianza con un grupo de soldados oficiales y comerciantesespañoles, contra la reciente establecida república del Perú actuando en nombre del rey frenando VII, los rebeldes llamaban a la restauración del gobierno español. No lograron su objetivo, pero consiguieron desestabilizar por tres años y medio el endeble equilibrio de la naciente república. Los principales líderes locales fueron capturados y varias de las reformas fiscales que habían establecido en laregión permanecieron en vigencia por muchos años. Más aun estos líderes guerrilleros otrora monarquitas , terminaron adaptándose al sistema republicano, incorporándose activamente al ejercito del nuevo estado caudillista y, más adelante convirtiéndose en pequeños burócratas particularmente, el líder principal , el arriero semi-letrado Antonio Huachaca, quien decía haber recibido un grado delejército real, se convirtió en un juez de paz.
Las razones de este levantamiento, conocido (o más bien poco conocido) como la “rebelión de los Iquichanos”, y el subsiguiente proceso de asimilación de las poblaciones de Huanta al estado republicano, fueron tratados en muchos niveles en otro estudio realizado por la autora. El objetivo en este ensayo es el de aclarar algunos puntos concernientes lahistoria e identidad de la gente que formo el grueso del ejército “restaurador”, los así llamados Iquichanos, según la autora este tema trasciende el interés de los historiadores. Pues, además de su presencia continua en la escena política nacional durante el siglo XIX, estos campesinos han jugado también un rol crucial en la política peruana contemporánea.
El trágico incidente del asesinato de 8periodistas peruanos en el año de 1983 en las tierras altas de la provincia de Huanta en el departamento de Ayacucho quienes investigaban la muerte de un grupo de aparentes senderistas (denominación que se le daba a los seguidores del grupo terrorista Sendero Luminoso) trajo a “los Iquichanos” al centro de la atención nacional el caso se lo denominado “la masacre de Uchuraccay”. Este casoadquirió ribetes políticos, produciéndose controversias y debates debido a la masacre y, tal vez con más fuerza, el juicio subsiguiente a los comuneros de Uchuraccay propiciando un debate alrededor de la naturaleza (irresuelta) de la identidad peruana, con no pocos comentarios evocando imágenes de la conquista.La masacre de Uchuraccay mostro otra realidad: la jerarquización étnica (lingüística)prevaleciente en la sociedad peruana, los problemas de comunicación, que ahondados por las jerarquías, separara a los peruanos de otros en el mismo momento en que los analistas sociales vislumbraban una nueva era de modernidad y democratización.
Además de ello durante el juicio se apelaron a estereotipos que aún subsisten en la actualidad como el de la “ingenuidad campesina”. Finalmente se hallaronresponsables a tres campesinos quienes fueron condenados y encarcelados.
La autora hace referencia al informe de la comisión investigadora de los sucesos de Uchuraccay (1983), donde se según ella muestra limitaciones de los especialistas para encontrar la verdad, fueron delegados para esta investigación no detectives sino antropólogos para descubrieran los elementos culturales de un asesinatoque, se pensaba, tenía fundamentos mágico religiosos. El informe identificaba a los comuneros de Uchuraccay como “Iquichanos”, este informe pensaba proporcionar razones no solo razones culturales sino también históricas que dieran pistas sobre la masacre. A la autora le llama la atención en el documento la aparente convicción de que había algo particularmente antiguo m culturalmente arcaico y...