Isaias


LUMEN GENTIUM


EL MISTERIO DE LA IGLESIA

En el primer capitulo del lumen gentium, empieza con, el misterio de la Iglesia, siendo la iglesia signo e instrumento de la unión íntima con Dios y unidad del género humano, pretendiendo presentar su naturaleza y su misión universal. El Padre Eterno creó todo el universo invitando a los hombres a participar de la vida divina ofreciendo lasalvación en Cristo imagen de Dios invisible. La obra de nuestra redención se efectúa cuantas veces se celebra en el altar el sacrificio de la cruz, por medio del cual «Cristo, que es nuestra Pascua, ha sido inmolado». Y, al mismo tiempo, la unidad de los fieles, que constituyen un solo cuerpo en Cristo, representada y realizada por el sacramento del pan eucarístico.
4. Realizada la obra que el Padreconfió realizar al Hijo sobre la tierra, fue enviado el Espíritu Santo quien es la fuente de agua que salta hasta la vida eterna, por quien el Padre vivifica a los hombres, muertos por el pecado, hasta que resucite sus cuerpos mortales en Cristo, El Espíritu quien habita en la Iglesia y en el corazón de los fieles como en un templo, y en ellos ora y da testimonio de su adopción como hijos. Y asítoda la Iglesia aparece como «un pueblo reunido en virtud de la unidad del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo» .
5. El misterio de la santa Iglesia se manifiesta en su fundación. «Porque el tiempo está cumplido, y se acercó el reino de Dios».La palabra de Dios se compara a una semilla sembrada en el campo, quienes la oyen con fidelidad y se adicionan, ésos recibirán el reino, luego va brotandopoco a poco y crece. Los milagros de Jesús, a su vez, confirman que el reino ya llegó a la tierra sin duda que el reino de Dios ha llegado a vosotros». Pero, sobre todo, el reino se manifiesta en la persona misma de Cristo, Hijo de Dios e Hijo del hombre, quien vino «a servir y a dar su vida para la redención de muchos». Por ello se presentó y constituido en Señor, Cristo y Sacerdote para siemprey derramó sobre sus discípulos el Espíritu prometido por el Padre.
6. Del mismo modo que en el Antiguo Testamento la revelación del reino se propone frecuentemente en figuras, las cuales están ya insinuadas en los libros de los profetas.Así la Iglesia es un redil, cuya única y obligada puerta es Cristo, de la que el mismo Dios se profetizó Pastor y cuyas ovejas, conducidas indudablemente porpastores humanos, son, guiadas y alimentadas continuamente por el mismo Cristo, bueno, santo, perfecto y único Pastor, que dio su vida por las ovejas. El mismo que plantó la iglesia como viña escogida, y edificación de Dios. El mismo Señor se comparó a la piedra que rechazaron los constructores, pero que fue puesta como piedra angular. Sobre este fundamento los Apóstoles levantan la Iglesia y de élrecibe esta firmeza y cohesión. Esta edificación recibe diversos nombres: casa de Dios, habitación de Dios en el Espíritu, tienda de Dios y sobre todo templo santo. Efectivamente, en este mundo estamos para servir, cual piedras vivas, para edificar la Iglesia, llamada «Jerusalén de arriba» y «madre nuestra» a ella, libre de toda mancha, la quiso Cristo unida a sí y dócil por el amor y lafidelidad, en fin, la enriqueció infinitamente con bienes celestiales, para que comprendiéramos la caridad de Cristo hacia nosotros, que supera toda ciencia.7.En ese cuerpo, la vida de Cristo se comunica a los creyentes, quienes están unidos a Cristo por el bautismo, en efecto, nos configuramos en Cristo: «porque también todos nosotros hemos sido bautizados en un solo Espíritu»,Con El fuimos sepultadospor el bautismo para participar de su muerte; mas, si hemos sido injertados en El por la semejanza de su muerte, también lo seremos por la de su resurrección». Participando realmente del Cuerpo del Señor en la fracción del pan eucarístico, somos elevados a una comunión con El y entre nosotros. «Porque el pan es uno, somos muchos un solo cuerpo, pues todos participamos de ese único pan. Así todos...