Italia 1968

Seminario de Investigación del Departamento de Historia Contemporánea (UCM)

Curso 2007-2008 (5ª Sesión: 28/2/2008)

Hacia una genealogía del ciclo de protesta italiano (1968-1977). Eventos, lugares, representaciones Fabrizio Cossalter y Maurizio Minicuci

1) Prólogo: entre historia vivida y memoria heredada Afrontar la historia de los movimientos sociales italianos de los años ’60 y ’70 esuna elección que, por múltiples razones, nos obliga a enfrentarnos también a nuestro propio pasado y a la memoria de aquellas experiencias colectivas, tan centrales en la acción política de nuestra generación. Nacidos al principio de los ’70, fuimos involucrados, bien a nuestro pesar, en los trágicos acontecimientos –maxime la así llamada estrategia de la tensión y la lucha armada- que marcaronla vida italiana sacudiendo sus frágiles costumbres democráticas. Preparando los materiales para el seminario nos hemos percatado de la aparente paradoja que estriba en el hecho de que nuestras prácticas políticas y actitudes culturales han sido orientadas menos por la vivencia de la década en la cual hemos crecido –los años ’80que por la experiencia heredada del largo ’68 italiano. Si el año 1980se abrió con más matanzas y asesinatos políticos, algunos años después pareció haber sido inaugurada una nueva etapa –la apodada “época del optimismo”1-, contraseñada por el fin de la recesión, por la supuesta normalización del sistema político y por el apogeo del individualismo, de la ideología del bienestar económico y de la dimensión simbólica del consumo de masas. Los rasgos del periodofueron, por un lado, la corrupción de la coalición de gobierno y la derrota del movimiento obrero y de los sindicatos, por otro, la difusión de modelos, culturas y estilos de vida fundados en los íconos del éxito y en la ostentación de la riqueza e impulsados por las imágenes publicitarias y los status symbol que se agolpaban en los mensajes de las recién nacidas cadenas televisiva privadas. La sociedaditaliana pareció entonces anhelar el olvido y, de hecho, persiguió la represión casi sistemática no sólo de los traumas recientemente vividos, sino también de las idealidades, los logros y el potencial utópico del ciclo de protesta. El recuerdo de los movimientos fue emarginado y hasta sometido a juicio (así puede ser interpretado el proceso contra Sofri, Bompressi y Pietrostefani por elhomicidio, nunca aclarado, del comisario Calabresi), mientras se imponía un relato colectivo según el cual los jóvenes estaban interesados tan sólo en los efímeros goces proporcionados por una especie de presente eternizado y eran totalmente faltos de compromiso político y participación civil. La
1

G. Crainz, Il paese mancato. Dal miracolo economico agli anni ottanta, Roma 2003, pp. 589-604.

1Seminario de Investigación del Departamento de Historia Contemporánea (UCM)

Curso 2007-2008 (5ª Sesión: 28/2/2008)

representación de los jóvenes de finales de los años ’80 como presos de las imágenes y los ídolos de la sociedad del espectáculo y atrapados en la telaraña de una presunta post-histoire y por lo tanto despreocupados de cualquier imaginación de futuro- fue desmentida de formacontundente por el movimiento estudiantil de la Pantera y por los consiguientes, multiformes derroteros políticos de una generación criada en los tópicos de la involución y en el derrumbe de las expectativas de un cambio radical. Entre 1989 y 1990 la casi totalidad de las universidades italianas y una parte consistente de las escuelas secundarias fueron ocupadas en oposición al proyecto de reformauniversitaria planteado por el ministro Ruberti y basado en la autonomía y la intervención del capital privado. Una generación de “indiferentes” que según la prensa moderada tan sólo buscaba la integración laboral y el acceso al consumo se rebeló contra la tentativa de imponer a la universidad la ideología de la privatización y del mercado, inaugurando otro ciclo de apropiación de unos espacios...