Jackio

50 años del estilo Jackie Kennedy

A Jacqueline Kennedy Onassis siempre le molestó que se la recordara su influencia en la moda y como el icono de estilo de las mujeres estadounidenses de los 60. Le parecía un detalle. Una superficialidad. Y ella misma prefería que en las contadas entrevistas que dio y que los escritores que escribían biografías sobre su primer marido John F. Kennedyomitieran ese detalle. Eso bien lo sabe el escritor Carl Sferrazza Anthony, quien cuando le envió un borrador de libro “First Ladies: The Saga of the Presidents' Wives and Their Power, 1789-1990” ("Las primeras damas: la saga de las esposas de los presidentes y su poder, 1789-1990"), recibió su manuscrito de vuelta con una corrección a la frase que decía: "Si hubo una esfera en la que Jacqueline tuvomucha influencia, fue la moda". La corrección, garabateada con tinta azul sobre la pata moda que decía: "¡Cosa que me disgustaba!".
Pese a sus reparos Jackie Kennedy es considerada una de las mujeres más elegantes e influyentes en la moda. Lo reconocen desde Diseñadoras como Carolina Herrera quien dijo “su estilo es el de la grandeza” hasta Carala Bruni, la mujer del presidente francés, quienhace unos años reconoció a Vanity Fair que su modelo a seguir era Jacqueline Kennedy. Y bueno también lo dice el libro Fashion Now de editorial Taschen que en una de sus páginas le rinde tributo: “Para nosotros su estilo está en todas partes, está en cada temporada, en todos los accesorios que impuso”.
El estilo Jacqueline Kennedy comenzó a delinearse a principios de 1960 cuando su marido,entonces senador demócrata, comenzó la carrera electoral contra Richard Nixon por presidencia de Estados Unidos.
Todo partió por un consejo de la legendaria editora de Vogue, Diana Vreeland, quien entonces se desempeñaba en Harper´s Bazaar. La señora Vreeland —famosa por sus comentarios mordaces y su notable ojo para imponer nuevos códigos de estilo— creyó conveniente que la mujer del candidatodemócrata debía vestirse con diseñadores estadounidenses y abandonar su gusto por los diseños franceses de Chanel, Givenchy o Christian Dior. Estaba convencida de que podía conseguir el mismo estilo con creadores nacionales como Ben Zuckermann, Stela Stoat y Norman Norell. La idea que luciera más americana que europea, para que de esa manera los electores y la mujer estadounidense se identificaran conella.
Jacqueline —Jackie para sus amigos, agradeció el consejo— pero luego de visitar los atelieres de estos diseñadores mantuvo su look. Le resultaba muy difícil cambiarlo porque estaba embarazada de John John, su segundo hijo, y porque se sentía más cómoda con el estilo pret-a-porter de la costura francesa. Antes de su matrimonio con Kennedy había vivido unos años en París donde asistió a laUniversidad de La Sorbona y se había aficionado a los vestidos más burgueses y sofisticados.
Su opinión cambió cuando su marido entró en la etapa final de la contienda electoral y decidió probar con algunos de los nombres de la moda americana que le parecieron más sofisticados. Pero sin exageraciones, para ella la manufactura norteamericana aún no se comparaba con un vestido de cóctel de Givenchyo un traje dos piezas de Chanel.
Al final tuvo que ceder.
El 8 de noviembre de 1960 en una reñida disputa John Kennedy ganó la elección y Jacqueline se convirtió en la futura primera dama (título que detestaba porque le parecía el nombre de un caballo) de Estados Unidos. Fines de noviembre, después del nacimiento de su segundo hijo, citó al diseñador Oleg Cassini al hospital de Georgetowndonde estaba convaleciente para pedirle que se hiciera cargo de su vestuario oficial. El creador —un reconocido playboy que había salido con Grace Kelly en su juventud y estaba casado con la actriz Gene Tierney— estaba de vacaciones en Nassau, Bahamas, cuando recibió el mensaje de Jackie, a quien sólo conocía superficialmente porque habían coincidido en algunas reuniones sociales. Cassini que...