Jekyll y Hyde

“La declaración de Enrique Jekyll: lo siniestro y su corrosión de la realidad”

















La caracterización de lo siniestro, para Freud, no resulta acabada de agotarse en lo nuevo y desacostumbrado. Es por ello que recurre a las diversas definiciones de heimlich y unheimlich – lo familiar y lo no-familiar -, para determinar que, en líneas generales, al primertérmino se lo relaciona con lo confortable y conocido, mientras que al segundo se lo hace con lo oculto y disimulado. En su intento por dilucidar la procedencia de lo siniestro, Freud demuestra su coincidencia con lo angustiante, estableciendo que “todo efecto de un impulso emocional, cualquiera sea su naturaleza, es convertido por la represión en angustia”1. Sin embargo, la diferencia fundamental quepresenta lo siniestro, en contraposición con lo angustiante, es la idea de retorno, entendiendo al primero como un posible devenir de lo segundo. Por lo tanto, lo siniestro haría referencia a lo que debía haber quedado oculto pero se ha manifestado; no se relacionaría con lo no- familiar, sino con aquello que siempre lo ha sido a la vida psíquica y que se ha tornado extraño mediante el proceso derepresión. La repetición involuntaria es la que vuelve siniestro lo que en otras circunstancias sería “inocente”, imponiéndose, de este modo, la idea de ineludible, donde, en otro caso, se habría pensado en casualidad.
En el texto de Stevenson, El extraño caso del Doctor Jekyll y de Mister Hyde, Hyde se consolida como símbolo de lo siniestro, resultando “el mal en estado de pureza”2. Enprincipio, su fisonomía produce, en el observador, “el efecto de un ser monstruoso”, aunque no es posible establecer “la línea en la que se aparta de la normalidad”3. De este modo, se cumple en Hyde el elemento necesario para que se vuelva siniestro: la familiaridad, ya que no es precisamente su anormalidad, la cual no puede ser determinada, la que produce el efecto repulsivo. Asimismo, su conductarevela el retorno de todos los modismos que la civilización, como proceso y como resultado, ha combatido. El acontecimiento mediante el cual se lo presenta en el texto –el incidente que el señor Enfield relata a Utterson- revela no sólo su crueldad sino también su falta de civilidad para conservar una convivencia armónica dentro de un grupo social. En Hyde, no hay distancia entre motivación yacción, no existe represión mediando esa relación. Utterson pareciera definirlo al expresar su envidia ante aquel que cede a “la fuerza de la pasión” para cometer “infracciones a la ley de la moral”4. La civilización, mediante la religión y su sistema educativo, ha impuesto leyes morales con el fin de educar a los ciudadanos y erradicar las conductas ligadas a la barbarie. Hyde es, entonces, el retornode lo reprimido que se manifiesta.
La declaración del Dr Jekyll, hacia el final del texto, revela manifestaciones de lo siniestro, especialmente en lo que Freud denomina “el desvanecimiento en los límites entre fantasía y realidad; cuando lo que habíamos tenido por fantástico aparece ante nosotros como real: cuando un símbolo asume el lugar y la importancia de lo simbolizado”.5 Hyde, comopersonificación de lo siniestro, corroe la realidad de Enrique Jekyll. Dicha realidad se encuentra sostenida en los valores morales burgueses que le imponen la lógica de “subordinarlo todo a la posición que ocupaba y a los progresos de mi carrera”6 . De esta manera, se consolida en Jekyll la dicotomía entre vida pública y vida privada, circunscribiendo a la primera su desarrollo profesional yrespetabilidad y a la segunda el tránsito por “los mares de la libertad” y la satisfacción de todo tipo de placeres.
Jekyll es descripto como “doctor en medicina y en derecho, miembro de la Sociedad Real y de otros muchos centros científicos y literarios”7, títulos que no hacen más que acrecentar la “monótona uniformidad” de su vida y, a su vez, el deseo de emanciparse de ella mediante “una...