jhfer iop

Matías Mosquera – DNI 34270500 – Historia II – Cátedra Vazeilles – Comisión 728/06/2010
1.La dictadura militar: desindustrialización y reconfiguración de lasrelaciones económicas y sociales
La dictadura militar que irrumpió en el país el 24 de marzo de 1976, llevó a cabouna restructuración económica y social total, la que se puede catalogar dentro de las mástraumáticas de nuestra historia:el tránsito de una sociedad articulada en torno alcrecimiento industrial a otra basada en un ajuste estructural regresivo con una clarahegemonía financiera. Se buscó modificar de modo radical las bases económico-estructurales que habían hecho posible la irrupción de fenómenos políticos como el peronismo, procesos sociales como el Cordobazo, el Rosariazo y el Tucumanazo, así comola emergencia delsindicalismo clasista y combativo.En primera instancia se tomaron tres primeras medidas de política económica:congelamiento salarial por tres meses, supresión del control de precios, y devaluacióncambiaria. Uno de los principales objetivos era la agresión al sector manufacturero, paralogran un quiebre del esquema sustitutivo y a su vez, un proceso de desindustrialización yreconfiguración regresivadel tejido manufacturero. Se alteraron radicalmente los tipos decambios múltiples que en el marco del modelo sustitutivo tendían a favorecer a los bienesindustriales, en aras de una reasignación de recursos favorable a los sectores que contabancon ventajas comparativas, en particular, el agropecuario. Una de las medidas de mayor impacto fue la reforma financiera
1
. Para las actividadesmanufactureras, sólo huboencarecimiento de créditos, lo que generó un desplazamiento de la inversión hacia lavalorización financiera de recursos.A partir de 1978 se implementó un enfoque monetario de balanza de pagos, sobre la base de la apertura de la economía y la confianza en las empresas privadas como motor. Seadoptó la “tablita”, que devaluaba el tipo de cambio a ritmo decreciente, de modo que losprecios tendieran a converger con los internacionales. La posibilidad de esta convergenciano resulta más que una falacia, en especial entre los transables y no transables, ya quesupone mercados de competencia y libre movilidad de los factores.Se produjo el cierre de más de 20 mil fábricas, lo que llevó a la caída del producto bruto del sector, caída de la ocupación, caída de la industria como factorordenador de lasrelaciones económicas y sociales del país. Lugar que fue ocupado por las actividadesfinancieras y la especulación.El golpe fue sufrido profundamente por el mercado laboral y la clase trabajadoraindustrial. Se contrajo el volumen de la producción fabril, se redujo la cantidad de obrerosocupados y se desató una fenomenal transferencia de ingresos desde los asalariados hacia
1
Elsector financiero comenzó a desempeñar un papel hegemónico en la absorción y ala resignación de recursos
2Cel:1540424400


Matías Mosquera – DNI 34270500 – Historia II – Cátedra Vazeilles – Comisión 728/06/2010
los capitalistas, aunque esto no implica que haya sido apropiado en su totalidad por empresarios del sector. Peor aún. La ganancia se volcó en las rentas de los propietarios pasivos,sin esperanza de estímulo a la inversión.Los cambios en la estructura de precios relativos favorecieron a aquellos actores queestructuralmente estaban en condiciones de adaptarse con agilidad a los lineamientos y losefectos coyunturales de la política económica, como lo eran las formas conglomeradas deorganización empresarial. Esto derivó en una creciente oligopolización industrial. Huboundesplazamiento en la cantidad de de ramas industriales en las que prevalecían formascompetitivas de mercado hacia actividades concentradas y sectores oligopólicos. Lo mismoocurrió en las respectivas participaciones en la producción sectorial. La gestión de ladictadura favoreció a un proceso de concentración de la producción manufacturera y conello la pérdida de participación de aquellas producciones...