Jinx, the loose cannon

Jinx vive para provocar el caos y jamás se detiene a pensar en las consecuencias; a donde quiera que vaya, deja un rastro de destrucción y pánico. Es una delincuente impulsiva y maniática, y lo quemás odia en la vida es sentirse aburrida; por lo que alegremente libera su propia versión de volátil pandemonio, especialmente al lugar que considera el más soso de todos: Piltóver. Con un arsenal dejuguetes letales a su disposición, desata las explosiones más brillantes y los estallidos más sonoros; lo que haga falta con tal de sorprender a las desafortunadas autoridades. Siempre fuera del alcancede la ley, el juego favorito de Jinx es jugar con lo mejorcito de Piltóver, en particular con Vi.
Piltóver era conocida como la Ciudad del Progreso, el lugar donde reinaban la paz y el orden. Peroun día la serenidad se vio comprometida con la llegada de un nuevo tipo de delincuente, como no se había visto nunca antes. Una misteriosa forajida comenzó a causar una multitud de travesuras,destructivas y retorcidas, que hicieron peligrar toda la ciudad y dejaron a sus habitantes como títeres de la peor oleada criminal en la historia de Piltóver.
Conforme la oleada de crímenes sin sentido nirazón aumentaba, empezaron a surgir versiones sobre avistamientos de la delincuente. Aunque la procedencia de la muchacha era todo un misterio, algunos vieron en sus armas rastros de la tecnologíahextech de Piltóver; otros más reconocieron en la vestimenta de la flacucha criminal la moda callejera de Zaun. Cada vez que la joven aparecía traía consigo problemas, como si fuera una maldición, así quequienes se cruzaron en su camino comenzaron a llamarla Jinx, “la maldición”.

El caos sembrado por Jinx no hizo más que aumentar. Caitlyn, sheriff de Piltóver, respondió declarando el estado deemergencia y organizando su cacería por toda la ciudad. Para no variar, Jinx hizo llegar al edificio más seguro de la Piltóver, la tesorería, un reto directo a su oficial más mordaz. Con la caricatura...