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Erase una vez en un país muy lejano, en el que existía una bella princesa.
Alto que creías que esto sería un cuento de hadas con un final feliz, la verdad no lo sabrás hasta que leas este cuento, si tú piensas que así será, adelante tienes esa opción, pero si no, ponte a leerlo descubrirás si en verdad existen o no los finales felices, los cuentos de hadas con amores eternos.
Ahora sicomencemos.
No muy lejos de aquí, hay una niña o mejor dicho una chava de 23 años llamada Vanessa, que le encantaban las películas de princesas, cuentos de hadas y todas esas cosas que normalmente a las niñas de 5 años les gustan, pero aunque Vanessa ya estaba crecidita ella seguía creyendo en el amor verdadero, y en todas sus relaciones entregaba el 100%, por aquella persona, pero desafortunadamenteella volaba muy cerca del sol, subía y subía en su nube rosa y cada vez caía peor, pero no le importaba, con tal de encontrar a ese zapo que con un beso de amor dado por ella, lo convirtiera en un príncipe, en su príncipe de mil colores, y pues obvio vivirían felices por siempre, como toda historia feliz, cuentos de hadas y cosas así.
Ella estudiaba gastronomía, y vivía con su novio Jesús, a losojos de Vanessa él era un pan de dios, una perita en dulce.
Sus amigos le aconsejaban que dejara a Jesús, porque con él iba a sufrir más que con los anteriores, a ella le valía un reverendo cacahuate, porque pensaba que él era el indicado (obvio como toda chava enamorada o ¿NO?).
Ella sabía de todas sus movidas, pero aun así lo perdonaba, por una simple y sencilla razón, lo amaba con locura,Vanessa sentía que sin él, su vida sería nada más y nada menos que ¡Nada! (yo creo que a todas nos ha pasado así, o por lo menos a mi si).
Ya sé que han de penar que es una pen……sativa mujer, pero pues qué hacer, si cuando el amor supuestamente te llega no hay como evitarlo.
Un día como cualquier otro Vanessa llega de la escuela, entra a la habitación, y ve lo inevitable (ya se imaginaran que), salede ahí lo más rápido que puede, pero aun así no logra escapar de los recuerdos, del famosísimo ¡Te lo dije!, y se desangra en gritos y llantos.
Pasó 1 mes, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8 meses y ella seguía viviendo como si algo de ahí le faltara, como muerta en vida, ya no salía, no veía a nadie y lo que normalmente pasa ¡Ya sabemos que!, Un día el destino, el carma, la causalidad o como lo quieran llamarle puso en frente a Alejandro, era un empleado de su padre, chocaron y él dijo:
* Ahí perdón no me fije ¿Estás bien?
Vanessa le respondió:
* Si, si claro no te preocupes, pero haber si la para la otra, te fijas mas con quien chocas.
Y así entablaron una conversación:
* Si, jajaja perdón, pero llego tarde al trabajo, y para acabarla, mi jefe es un histérico, hash me choca.
* Elhistérico de tu jefe, es mi papá
* ¡Enserio! o perdón lo lamentó tanto, no le digas que yo dije eso.
* Jaja, no te preocupes de mi no saldrá nada, que apoco si mucho miedo hacia mi papá.
* La verdad sí, pero bueno, creo que no nos la pasaremos todo el tiempo hablando de tu papa, ¿Cómo te llamas?
* Vanessa, y ¿Tú?
* Alejando. Oye ¿Te gustaría ir a cenar a un restaurante o algoasí?
* No, me he pasado mi vida entera en restaurantes, y más aparte me engento, no nada de eso olvídalo, no, no es lo mío.
* Ok, entonces ¿Cómo puedo recompensar lo sucedido?
* Mmm… ¿Qué te parece si me cocinas algo rico en mi casa?
* Bueno es lo menos que puedo hacer.
* Me parece bien, te apunto la dirección y vienes a las 8:00 vale.
* Si tienes un papel o algo.
* Claroaquí te la apunto.
Vanessa le apunto la dirección y así quedaron, a las ocho en su casa.
Ya eran las ocho y Vanessa lo esperaba, llegó Alejandro, cocino y se pusieron a charla un poco, claro para irse conociendo.
Alejandro, iba todos los días a la misma hora solo a cocinarle y después a charlar.
Pasó el tiempo y pues empezó a ver ahí una chispa entre los dos, pero Vanessa y Alejandro...