Jose antonio encinas

Un ensayo de Escuela nueva para el Perú
La escuela por su naturaleza es un cuerpo colegiado donde maestros y estudiantes persiguen un solo propósito: la de ponerse al servicio de los intereses de la colectividad. El maestro convertido en un celoso guardián de la ley y de los reglamentos, sacrifica la esencia de las cosas por la forma, olvida que es un educador antes que un funcionamiento alservicio de la administración pública.
La escuela debe tener ideales propios y avance en sus tendencias; de allí que se combate toda escuela que ponga de lado el artificialismo infecundo de una organización escolar hecha a base de un empirismo que desconcierta.
Se busca que el estudiante como participe de la vida escolar sea respetada su personalidad, destruyendo la barrera que lo separa delmaestro, entonces surge inmediatamente todos los elementos que tratan de conservar las cosas como si estas fueran inmutables.
El análisis de cada uno de estos elementos pondrá en relieve las deficiencias y dificultades con que se preparó el profesorado normal, los errores que se cometen en la organización del magisterio; la falta de técnica en el elemento dirigente, por ultimo los puntos de vista quedeben tenerse presente para una ulterior reforma sobre la materia.

El maestro
José Antonio Encinas afirma que el maestro debe estar preparado en el conocimiento de los problemas sociales, debe conocer la historia de su país, y conforme a sus enseñanzas colaborar en las soluciones que agitan la vida nacional. La falta de estos conocimientos y de esta preparación desvirtúa el papel socialque a la escuela le corresponde desempeñar.
Así la escuela va a transformarse en un verdadero hogar del niño, donde el maestro es el amigo y el camarada y no el tradicional verdugo que siente una enfermiza fruición en martirizar a los escolares. Por eso el propósito que un maestro debe perseguir no es enseñar sino edificar, construir con los materiales que el estudiante aporte.
Los maestros no sonlos menos repetidores de textos, ni tienen en sus manos, una colectividad escolar capacitada para repetir sus propios actos: el elemento estudiantil con el cual tiene que trabajar es el menos conocido, el más inestable, el que requiere un conocimiento profundo de las normas que rigen su desarrollo. Pretender que un maestro de enseñanza primaria sea simplemente un preceptor encargado de enseñar aleer y a escribir, es desvirtuar el concepto científico de la escuela y desconocer el importante papel que le toca desempeñar en el proceso social.
Por eso se debe organizar una verdadera carrera del magisterio que comienza en la escuela primaria y termina en la universidad. Los maestros, al ponernos al servicio del estado, no hemos vendido nuestra conciencia, ni hemos hipotecado nuestrasopiniones, ni hemos perdido nuestra ciudadanía. El hecho de recibir una suma mensual de dinero significa solo el pago de nuestros servicios técnicos; pero no el pago de un silencio y de una conformidad que repugna. Quienes pretenden que el maestro debe “callar, obedecer y trabajar”, están en un error y cometen un acto de injusticia y de insulto a la dignidad humana, suponiendo que el maestro de lasnuevas generaciones debe ser un esclavo destinado a preparar una generación moldeada bajo el mismo criterio. El maestro debe tener libertad de opinar, porque ante todo es un mentor social. Su misión no puede equiparse a la de un militar a quien es posible pedirle la más absoluta obediencia para mantener la disciplina, que es a su vez la base de la jerarquía en un ejército, pero exigir a un maestrosemejante sumisión, es desvirtuar el propósito de la escuela y cambiar de rumbo a la educación humana, que requiere plena libertad.

El centro escolar
La reforma escolar del año 1903 divide la enseñanza en dos categorías: La primera se denomina la escuela elemental, con dos años de estudio de carácter obligatorio para los niños de ambos sexos; la segunda, “centro escolar, con tres años...