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Páginas: 57 (14108 palabras) Publicado: 22 de junio de 2013
Pequeños toques hacen grandes rasgos
Lo que me preocupa no es que me hayas mentido, sino que, de ahora en 
adelante, ya no podré creer en ti. (Friedrich Wilhelm Nietzsche)
Lo que no me mata, me fortalece. (Friedrich Wilhelm Nietzsche)
Hay dos cosas infinitas: el Universo y la estupidez humana. (Albert Einstein)
Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo. (Albert Einstein)El sabio no dice todo lo que piensa, pero siempre piensa todo lo que dice.  (Aristóteles)
El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona. (Aristóteles)
Vive como si fueras a vivir cien años, pero estate preparado como si fueras a morir mañana.
No es el más fuerte ni el más inteligente el que sobrevive, si no el más capaz de adaptarse a los cambios…
Algunas personas están vivas solamente…Porque el asesinato es ilegal.
Si la vida te da limones… Pide sal y tequila
La vida tiene una meta ¡Trata de llegar a ella!
La gente más feliz no necesariamente tiene lo mejor de todo; simplemente disfrutan al máximo de todo lo que está en su camino…
Errar es humano, pero echarle la culpa a otro es más humano todavía.
Si yo fuera tú me enamoraría de mí.
Es bueno dejar la bebida, lo malo es noacordarse dónde.
No estoy en contra de que haya hombres feos, pero por qué todos viven en esta ciudad.
La pereza es la madre de todos los vicios, y como a la madre hay que respetarla.
Si un pájaro te dice que estás loco, debes estarlo pues los pájaros no hablan.
El alcohol mata lentamente, no importa no tengo apuro.
El mundo se está quedando sin genios: Einstein se murió, Beethoven se quedósordo, y a mí me duele la cabeza
Uno aprende a amar, no cuando encuentre a la persona perfecta, sino cuando aprenda a creer en la perfección de una persona imperfecta
Te quiero no solo por cómo eres, sino por como soy yo cuando estoy contigo.







La zorra y el leñadorUna zorra estaba siendo perseguida por unos cazadores cuando llegó al sitio de un leñador y le suplicó que la escondiera. El hombre le aconsejó que ingresara a su cabaña. Casi de inmediato llegaron los cazadores, y le preguntaron al leñador si había visto a la zorra.El leñador, con la voz les dijo que no, pero con su mano disimuladamente señalaba la cabaña donde se había escondido. Los cazadores no comprendieron las señas de la mano y se confiaron únicamente en lo dicho con la palabra.La zorra al verlos marcharse, salió sin decir nada. Le reprochó el leñador por qué a pesar de haberla salvado, no le daba las gracias, a lo que la zorra respondió: Te hubiera dado las gracias si tus manos y tu boca hubieran dicho lo mismo.Moraleja: No niegues con tus actos, lo que pregonas con tus palabras
El perro y el cocinero
Preparó un hombre una cena en honor de uno de sus amigos y de sus familiares. Y su perro invitó también a otro perro amigo. -- Ven a cenar a mi casa conmigo -- le dijo.Y llegó el perro invitado lleno de alegría. Se detuvo a contemplar el gran festín, diciéndose a sí mismo: --! Qué suerte tan inesperada! Tendré comida para hartarme y no pasaré hambre por varios días....
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