Kara No Kyoukai Vol

空の境界
Kara no kyoukai
(Límites vacíos)

Escrita por Nasu

Kinoko (奈須 きのこ)

Capítulo 1: Vista desde lo alto (俯瞰風景); Capítulo 2: Primera investigación de homicidio
(殺人考察〈前); Capítulo 3: Dolor prolongado (痛覚残留); serializadas por primera vez
en la web Takebōki (竹箒, “http://www.remus.dti.ne.jp/~takeucto/”), 1998.
Compilado y publicado en tapa dura por el autor, en diciembre de 2001.
Edición de tapadura por Kōdansha, publicada en Agosto de 2004.
Venta masiva de su edición en tapa dura por Kōdansha, publicada en Noviembre de 2007.

Arte de la cubierta y el interior por

Takeuchi Takashi (武内 崇).

Traducción al inglés por Cokesakto
Traducción al español por Crescent Moon

Kara no kyoukai
volumen 1

Capítulo 1 / Vista desde lo alto [Página 9]

Capítulo 2 / Primera investigación de homicidio[Página 45]

Capítulo 3 / Dolor prolongado [Página 90]

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Vista desde lo alto

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Ese fue el día en que, movida sólo por un capricho, tomé la avenida principal de camino a casa. No
era un atajo y no planeaba pasar a ningún lugar de allí en particular. Fue tan sólo algo que decidí
trivialmente.
Esa parte de la avenida estaba repleta de rascacielos y altos condominios; algunos antiguos, otrosabandonados, pero la mayoría nuevos; todos ellos revueltos en un atestado cielo. Apostaría a que
todo el mundo en esta ciudad -incluyéndome- ya se aburre de verlos día tras día. Mientras
caminaba entre las construcciones, de golpe, vi caer algo desde un tejado a la acera de concreto.
Era una persona.
En el instante que cayó, oí un sonido húmedo, crudo y repugnante; un sonido que en verdad no
querríasoír. Juzgando por la altura, estaba claro que quien sea que fuera él o ella, murió en el
instante que golpeó el pavimento.
A medida que me acercaba, comenzaba a asimilar lo que había ocurrido con más claridad. Todo lo
que quedó, todo lo que mi mente podía captar en ese instante, era un sendero escarlata fluyendo
lentamente a través del asfalto; las huesudas y frágiles extremidades, al igual queel largo cabello
negro que aún contenía algo de su belleza viviente.
Y ese rostro sin vida.
La escena sacudió mi mente, eludiendo la imagen de una flor aplastada entre las páginas de un
libro viejo y mohoso.
Quizás debido al cadáver con su cuello torcido, lucía como un lirio quebrado para mí.

11

Era una noche a comienzos de Agosto cuando Mikiya vino a visitarme sin ningún motivo en
particular.Como lo hacía comúnmente, abrió la puerta y se quedó en el pasillo de pie sin hacer
nada; desde mi punto de vista parecía una especie de mayordomo esperando una orden.
“Plena tarde, Shiki, y te ves tan floja como siempre” Dice con una sonrisa en su rostro. Un extraño
saludo es justamente algo que esperarías de él.
“¿Oíste lo que pasó?” Continúa “Alguien volvió a saltar. Esta vez yo estaba en laescena.
Últimamente ha habido un montón de incidentes, pero nunca esperé que viniera a cruzarme con
uno” Entonces estira su brazo con una bolsa mientras desata sus zapatos “Ponlo en la nevera”
Dentro de la bolsa hay dos potes de helado de fresa1 Haagen Dazs. Supongo que los quería dentro
del congelador antes que se derritieran. Mientras le echaba un vistazo a la bolsa, Mikiya ya había
desabrochadosus zapatos y entró.
Mi hogar es un pequeño apartamento. Lo primero que ves al abrir la puerta es la sala de entrada,
de no más de un metro, donde quitas tus zapatos; luego llegas a la sala de estar, que es a la vez mi
dormitorio, donde Mikiya ya se ha comenzado a sentir cómodo. Lo sigo mientras observo su
espalda.
“Shiki, has estado faltando a clases ¿verdad? Tus calificaciones no importan muchopero, vamos,
deberías asistir por lo menos. No me digas que ya olvidaste tu promesa de ir a la universidad
juntos”
“Qué palabras más sabias” Le respondí con frialdad “Especialmente viniendo de alguien que dejó
eso de la universidad antes que yo. Además, esa supuesta promesa no me suena”
“No empieces a ponerte difícil de nuevo, Shiki”
Mikiya no sabe cómo responder una vez está acorralado en una...